El funcionamiento interno y la organización de un organismo electoral (OE) dependerá de su estructura, sus competencias y sus responsabilidades. Algunos de ellos, podrán poner en marcha todo el conjunto de tareas esenciales (funciones fundamentales) relacionadas con una elección, mientras que otros sólo podrán ser responsables de algunas de ellas. Sin importar de cuáles de estos elementos es responsable el OE, cuántos OEs puede tener un país, o si la administración de las elecciones está descentralizada o no – la administración de las elecciones se refiere a la misma estructuración y organización.
Para funcionar, el organismo electoral necesita establecer un equipo de trabajo, un plan para conducir las elecciones, así como procedimientos que aseguren que el proceso electoral será llevado a cabo exitosamente, en cumplimiento a lo dispuesto en la ley y dentro del presupuesto y calendario planeados.
Algunos de las secciones que se cubren en este capítulo son: