Puede
ser necesario que el organismo electoral tome medidas especiales de seguridad
para evitar que se trate de perpetrar algún fraude durante el proceso de difusión
o publicación de los resultados.
Es
importante que sólo las personas autorizadas tengan acceso a los resultados consolidados
(antes de hacerlos públicos) y que cualquier modificación sólo se realice con
la autorización debida.
Estas
medidas pueden tomarse tanto en los centros de escrutinio como en las oficinas
nacionales del organismo electoral.
Es
conveniente controlar o restringir el acceso al área en donde se preparan los
resultados.
Si se
utilizan sistemas computarizados para integrar y consolidar los resultados, es
importante que cuente con medidas de seguridad como contraseñas, etc. Sólo las
personas autorizadas deben tener acceso a los sistemas computarizados y poder modificar
los resultados. Estas personas tienen que seleccionarse cuidadosamente e identificarse
por anticipado. También es recomendable que se les pida a estas personas que
firmen un contrato que contenga una cláusula de confidencialidad.
Es usual
que la policía, las fuerzas armadas o elementos de seguridad privada estén
disponibles para atender cualquier solicitud de apoyo por parte del organismo
electoral. Antes del día de la elección, se puede designar a una persona del
organismo electoral para que tenga toda la información específica en caso de
que se necesite la asistencia de las fuerzas de seguridad.
Es
importante que todos los participantes del escrutinio a nivel nacional o en los
centros de escrutinio porten sus identificaciones para evitar confusiones.
Es
recomendable que el personal del organismo electoral, los representantes de
partidos y candidatos, los observadores, los medios de comunicación, los visitantes
y las autoridades, cuenten con gafetes o tarjetas de identificación. Si resulta
práctico, el personal de las fuerzas armadas puede permanecer en el centro de
escrutinio, pero también deben portar sus identificaciones.
Entrega de los resultados oficiales
Antes de
entregar los resultados oficiales, el organismo electoral tiene que incluir
toda clase de votos: postales; los derivados de la votación anticipada; de las
mesas de votación móviles; etc. Si esos votos se reciben unos días antes de la jornada
electoral, será más fácil incluirlos en los resultados.
Sin
embargo, si el organismo electoral acepta esos votos hasta el cierre de la
votación, tiene que diseñar procedimientos especiales para que no se retrase la
publicación de los resultados hasta días después de la elección.
Si los
votos especiales se cuentan unos días antes de la elección, tienen que resguardarse
de forma segura y el acceso a ellos debe estar prohibido hasta el cierre de la
votación. En ocasiones, estos votos representan un buen indicador estadístico
del resultado final de la elección. Si por error se publican estos resultados
antes de tiempo, podrían afectar seriamente los resultados o los niveles de
participación en la elección.
Los
resultados oficiales deben publicarse lo más pronto posible.
Entre
uno y cinco días puede ser un lapso razonable para publicar los resultados,
pero se tiene que poner énfasis en prepararlos lo más rápido que sea posible.
El organismo electoral puede hacer públicos reportes periódicos de los resultados
conforme los reciba o tenga disponibles.
En muchos
sitios se considera lo más apropiado que sean los medios de comunicación y las organizaciones
no gubernamentales quienes anuncien o publiquen los pronósticos preliminares de
la votación. Sin embargo, con el objetivo de demostrar transparencia, el
organismo electoral puede hacer públicos los resultados conforme los reciba.
El
organismo electoral debe considerar el impacto que tienen las zonas horarias en
la publicación de los resultados. Si se publican los resultados de una parte
del país mientras siguen abiertas las mesas de votación en otras, se podría
crear confusión o apatía entre los votantes.
Para evitar
esta situación se podrían utilizar horarios escalonados. Sin embargo, si se
toma en cuenta el tiempo necesario para transportar las urnas a los centros de
escrutinio, puede ser que esto no represente mayor problema. Si las horas de
votación no se pueden cambiar, entonces se podría aplazar el escrutinio.
Una vez
que se recibieron los resultados de todos los centros de escrutinio, se tienen
que compilar para publicar los resultados nacionales oficiales de la elección o
referéndum. Los resultados también se pueden compilar por región, por partido
político, o como resultados globales nacionales.
El organismo
electoral tiene que anunciar el resumen de los resultados finales lo más pronto
posible y los puede publicar en un reporte.
El
organismo electoral tiene que ser la única organización que anuncie y publique
los resultados finales oficiales, a menos que las estructuras judiciales tengan
un papel en la certificación de los resultados. En muchos casos, debe aclararse
que el organismo electoral es la única fuente oficial para dar los resultados.
El papel de los tribunales
En
algunos países, el poder judicial solo se involucra en el proceso electoral
después de la elección, cuando llega el momento de juzgar violaciones a la ley
electoral o cuando se tiene que realizar un recuento judicial.
En otros
lugares, los tribunales pueden cumplir un papel importante en la confirmación o
certificación de los resultados de la elección, es decir, los resultados solo
son oficiales cuando las cortes los confirman. Esa confirmación tiene que
producirse lo más rápido posible para evitar la inestabilidad política y
posibles retrasos en la transmisión del poder de un gobierno a otro.
En
algunos casos los tribunales pueden estar directamente involucrados en el
escrutinio. Generalmente, estos casos se presentan cuando se requiere que la
aprobación final al escrutinio provenga de la estructura judicial.
Publicación de resultados detallados
En
muchos países se ordena que, después de hacer públicos los resultados finales,
se publiquen los resultados detallados o desagregados en la gaceta oficial del
gobierno o en otra publicación oficial.
Legalmente,
los resultados suelen entregarse a la legislatura, a la agencia, al departamento,
o a la entidad administrativa a la que el organismo electoral le rinda cuentas.
A los líderes políticos y a los candidatos que contendieron en la elección se les
puede enviar una copia de cortesía del reporte final que se haya publicado.
La
publicación del reporte final detallado de la elección puede tomar varios meses
de preparación y producción. Por restricciones financieras, en algunos países
los candidatos y todas las demás personas, partidos, u organizaciones interesadas
tienen que adquirir sus propias copias de la publicación.
Después
de que se publicaron y se conocen los resultados finales, es conveniente que el
nuevo gobierno preste juramento lo más pronto posible para evitar una posible
inestabilidad política y retrasos en la transición del poder. Dependiendo del tipo
de sistema político con que cuente un país, este proceso puede tomar una semana
o más.
Mezcla de resultados para proteger la
secrecía del voto
El
organismo electoral puede mezclar o amalgamar los resultados de varias mesas o
centros de votación. Esta práctica se utiliza cuando el procedimiento de
votación abre la posibilidad que se pueda identificar a las personas cuyos votos
se destinaron a una urna en particular, o si el número de votos en la urna es
tan pequeño y existe la posibilidad de que casi todos ellos hayan beneficiado a
un solo partido o candidato.
En esos casos,
la secrecía del voto puede verse comprometida. Y es por eso que los resultados de
una urna o mesa tienen que mezclarse con los de otras mesas de votación. Esto
también puede realizarse cuando la secrecía de votos individuales puede
asegurarse, pero exista el riesgo de que en una mesa de votación en particular
hayan votado en una forma tal que puedan tomarse algún tipo de represalias por
el sentido de su voto.
Estos
problemas se pueden contrarrestar si se mezclan los votos de dos o más urnas de
distintas áreas y después se escrutan todos juntos, realizando las anotaciones
necesarias en la respectiva documentación. Es importante que esos procedimientos
se realicen en el centro de escrutinio antes de que se escruten las urnas.
También
se pueden mezclar los resultados de los electores encarcelados, de los votos
ausentes y de las demás categorías de electores que utilizan votos especiales.
Cuando los votos son escrutados en la oficina central del organismo electoral,
es más fácil mezclar resultados para proteger la secrecía del voto.
Para uso estrictamente interno, se podría realizar alguna anotación
especial en la documentación o formatos correspondientes para guardar un
registro auditable claro.