Los países que delimitan distritos electorales deben
establecer ciertos lineamientos y una estructura formal para llevar a cabo el
proceso. Debido a que los diferentes distritos pueden arrojar diferentes
resultados electorales, aún cuando el modelo de votación permanece igual, las alternativas
implicadas en el trazado son importantes. Entre estas opciones, consideremos
las siguientes:
- ¿Quién debe trazar los límites del distrito?
- ¿Quién debe definir el plan final de distritación?
- ¿El Congreso debe tener algún rol en el trazado de distritos o decidir sobre el plan final?
- ¿Tendrá el público en general intervención dentro del proceso de redistritación?
- ¿Qué tan frecuentemente deben ser rediseñados los distritos?
- ¿Cuánto tiempo llevará el proceso de distritación hasta ser completado?
- ¿Deberían establecerse criterios formales a ser considerados por los diseñadores? Si es así, ¿cuáles?
- ¿El plan debe ser pugnado en los Tribunales?
La tarea de trazar distritos debe ser asignada a alguna
autoridad competente. La composición de ésta y el grado de independencia otorgado
varía considerablemente de un país a otro. Tradicionalmente, a los congresos se
les ha permitido trazar sus propios distritos. Sin embargo, de manera gradual los
países están confiriendo este proceso a comisiones independientes. Esto corresponde
a un movimiento internacional para eliminar la participación de los "políticos"
del proceso de redistritación.
Las reformas que han reemplazado a las legislaturas por
comisiones especializadas también han incorporado
requisitos para aumentar el acceso público en el proceso e identificar los criterios
formales a ser considerados por los comisionados durante el trazado de los
distritos. Estos criterios son usualmente mencionados en la ley electoral del
país. Y muchas veces incluyen factores tales como la igualdad de la población, el
respeto a los límites administrativos locales
y otras características geográficas como los límites naturales (físicamente
definidos) y el reconocimiento de las comunidades de interés.
Generalmente, los países no han adoptado criterios de
redistritación concernientes al resultado concreto del proceso de distritación
- por ejemplo, representación justa para partidos políticos o grupos
minoritarios. Esto debido a que los distritos uninominales, empleados por
muchos de los países, no pueden garantizar resultados que sean proporcionales,
o por lo menos mínimos, para los partidos políticos minoritarios o minorías
raciales, étnicas, religiosas o lingüísticas de la población. Algunos países,
sin embargo, han adoptado disposiciones especiales diseñadas para modificar los
efectos de este tipo de distritos y para asegurar algún grado de representación
de los grupos minoritarios.
Esta sección examina las opciones que tienen los
países sobre los lineamientos y estructura para llevar a cabo la distritación: