Los partidos
políticos llevan a cabo varias tareas tanto durante los periodos de las
campañas electorales como en los que median entre una elección y otra. Toda vez
que gran parte de las actividades relacionadas con los procesos de toma de
decisión, cambios ideológicos y selección de candidatos se llevan a cabo en el
seno de los partidos políticos y no en campos de dominio público, es importante
observar su funcionamiento interno. Es común que se exija un cierto grado de
democracia interna en los partidos políticos y aunque el concepto no está bien
definido, es posible identificar algunos de sus componentes básicos. Algunos de
los elementos básicos de la democracia interna son la rendición de cuentas de
sus dirigentes, los procedimientos de consulta con sus miembros (y el
electorado en su conjunto), la presencia regional o local y los procedimientos
transparentes para la selección de candidatos.23
El funcionamiento interno de los partidos políticos puede depender en
alguna medida de las regulaciones legales, como las contempladas en la
Constitución o en la ley de partidos políticos, pero depende en mayor medida de
sus regulaciones internas. El funcionamiento interno de los partidos políticos
tiene que ver con la forma en que las distintas necesidades, intereses y
demandas de la sociedad se reflejan en el Parlamento.
Las regulaciones legales relacionadas con el funcionamiento interno de
los partidos pueden incluir normas de democracia interna, como las relativas a
la selección de sus dirigentes o la representación de mujeres en sus cargos
directivos.24
Las regulaciones internas de carácter voluntario suelen contemplar los
procedimientos para la selección de candidatos, como la celebración de
elecciones internas, o la fijación de cuotas de carácter voluntario, como las
de género o las relativas a las minorías étnicas. Los partidos políticos
seleccionan y postulan candidatos para competir en las elecciones, les brindan
apoyo para que desarrollen sus campañas y los respaldan con todo lo necesario
para que contiendan.
Más aún, la estructura partidista es esencial para analizar su
funcionamiento interno. Permite determinar quiénes influyen en los procesos de
toma de decisión y qué tanta influencia tienen.
El papel de los medios de información y divulgación partidista también
es importante para comprender su funcionamiento interno.
En el apartado sobre el “papel de sus afiliados” se examina cómo los miembros de un partido político pueden
ejercer influencia sobre sus dirigentes y en los procesos de toma de decisión
interna.