Un partido político es un grupo organizado de personas que comparten
objetivos y opiniones políticas semejantes y que buscan influir en las
políticas públicas mediante la elección de sus candidatos para cargos públicos.
En una democracia que opera de manera estable, los partidos tienden a
ser instancias enraizadas de manera profunda y duradera en determinadas
estructuras de la sociedad. En una sociedad libre y justa, los partidos
vinculan a las instituciones de gobierno con la sociedad civil y se consideran
como un componente indispensable para que cualquier sistema político democrático
moderno funcional.
Los partidos políticos llevan a cabo funciones clave en un sistema
democrático, tales como:
- Recabar y articular las prioridades en las políticas públicas y las
necesidades y problemáticas de la sociedad identificadas por sus miembros y
simpatizantes.
- Socializar y educar a los electores y a los ciudadanos en lo que
concierne al funcionamiento de los sistemas político y electoral y producir
valores políticos generales.
- Encontrar el punto de equilibrio entre distintas demandas y convertirlas
en políticas generales.
- Alentar y movilizar a los ciudadanos para que participen en las
decisiones políticas y transformar sus opiniones en alternativas políticas
viables.
- Servir de medio para que los ciudadanos hagan llegar su voz al gobierno.
- Reclutar y capacitar candidatos para que puedan ocupar cargos públicos.
A los partidos políticos también se les describe en el mundo como
mediadores institucionalizados entre la sociedad civil y quienes toman las
decisiones que se ponen en práctica. Como tales, permiten que las demandas de
sus miembros y simpatizantes sean atendidas por el gobierno y en el Parlamento.
Aunque cumplen varias funciones vitales en las sociedades democráticas, la
postulación de candidatos para ocupar cargos públicos a través de la
realización de campañas electorales es la función más visible a los ojos del
electorado.
Para llevar a cabo las funciones y tareas referidas, los partidos
políticos y los ciudadanos requieren que la Constitución o las leyes garanticen
derechos y obligaciones como los siguientes:
- Libertad de organización
- Libertad para postularse como candidato en una elección
- Libertad de expresión y reunión
- Disposiciones para una competencia justa y pacífica entre partidos y
candidatos
- Mecanismos para garantizar la pluralidad
- Inclusión en el proceso electoral y contactos con los organismos
electorals
- Campo de juego equitativo y sin discriminación
- Garantías de acceso y cobertura equitativos
- Financiamiento transparente y sujeto a rendición de cuentas
El funcionamiento interno de los partidos políticos está determinado, en
alguna medida, por fuerzas externas (como el sistema electoral, la cultura
política, el marco legal, etc.), pero sobre todo por procesos internos. Los
factores que influyen en los partidos políticos desde su interior incluyen la
personalidad de sus dirigentes y funcionarios, sus fundamentos ideológicos, la
historia partidista y la cultura política interna. Si un partido político
quiere que los principios democráticos de la política electoral se apliquen en
su interior, puede considerar prácticas como procesos de consulta e información
interna, estructuras y reglas (formales e informales) para su organización y
procesos de toma de decisión y principios de transparencia en su funcionamiento
a todos los niveles. Los miembros de los partidos políticos también pueden
asumir funciones más formales en los procesos de toma de decisiones, como
participar en las elecciones internas para elegir a sus dirigentes o a sus
candidatos a cargos de elección popular. Muchos partidos también trabajan
activamente para fortalecer el papel de grupos tradicionalmente
subrepresentados en su interior.