Los
OE generalmente necesitan emitir y aplicar una serie de regulaciones que
gobiernen el funcionamiento de sus operaciones. Estas pueden contemplar
aspectos administrativos, financieros, y técnicos, tales como la seguridad y
garantías al personal, la autorización para hablar ante los medios, los
procedimientos de las reuniones, la participación en los comités internos, los
controles logísticos, las adquisiciones,
el control de activos, los gastos financieros y la administración del
registro. Estas regulaciones pueden tener mayor impacto si se requiere que sean
acordadas y formalmente emitidas por los miembros del órgano ejecutivo del OE
(o por el jefe del Secretariado en un OE de modelo gubernamental).
Los OE pueden delegar ciertas atribuciones para algunos
miembros específicos de la Secretaría para hacer menos complejas las regulaciones
internas. La distribución de regulaciones para todos los miembros del OE y el
personal (tanto en oficinas centrales como en las regionales y locales)
promoverá un mayor sentido de unidad. Es necesario contemplarsanciones claras y
obligatorias por infracciones a estas regulaciones. Los procedimientos
establecidos para el cumplimiento de estas sanciones necesitan estar abierta y
completamente definidas, y seguir los principios aceptados de justicia. Para
los modelos de OE gubernamentales y otros que cuentan con personal del servicio
público, las regulaciones del servicio público pueden aplicar automáticamente; aunque
también es posible que se modifiquen para que las regulaciones las aplique el
OE.