Independientemente del modelo adoptado, el OE necesita establecer una relación con el gobierno y la legislatura para tratar aspectos tales como la legislación electoral y el presupuesto. Para un comité multipartidista en la Legislatura, como en el caso del Comité Permanente para Asuntos Electorales en Australia, resulta una buena práctica relacionarse con la materia electoral, y para un integrante del Gabinete, manejar todos los asuntos relacionados con el OE y también para hablar en su representación ante el Gabinete y la legislatura. Para el modelo gubernamental de OE, el ministerio correspondiente generalmente podría ser el departamento de donde depende el OE.
A menos de que un OE de modelo independiente o mixto cuente con un vocero que lo represente, se puede asignar esta tarea específicamente a un ministro, pues dentro de las materias que le competen al OE, resulta complicado atraer la suficiente atención de la legislatura o el gabinete. Por ejemplo, los arreglos en Namibia bajo los cuales el vocero maneja todos los asuntos relacionados al OE, incluyendo la ley electoral y su presupuesto, habían presentado en el pasado algunos problemas al organismo electoral debido a que el vocero no está representado en el gabinete, y las reglas en éste establecen que las propuestas para una legislación primero deben ser presentadas al gabinete por uno de sus miembros. Una crisis por retrasos en las reformas a la ley electoral en 2003, condujeron al nombramiento de un ministro “guardián” temporal sobre el OE y a una revisión de la relación entre el organismo electoral y el gabinete.