El término “OE de transición” se
refiere a aquellos organismos electorales que se instauran de manera temporal
para facilitar la celebración de elecciones en periodos de transición. Los OE
de este tipo entran en funciones bajo el auspicio de la comunidad
internacional, por ejemplo a través de las Naciones Unidas, y contemplan o
incluyen la participación de expertos internacionales entre sus miembros. Entre
los países que han instaurado este tipo de OE se encuentran Camboya (1993),
Bosnia y Herzegovina (1996) y Timor (2000).
Aunque en sentido estricto no se
reconocen como “internacionales”, los organismos electorales en Afganistán
(2004) y Sudáfrica (1994) funcionaron como instituciones nacionales con
atribuciones para designar a miembros internacionales. En 1994, el OE de
Sudáfrica se conformó por cinco expertos internacionales, sin embargo, desde 1996 ha tenido un OE
nacional de carácter independiente.
Una ventaja de los OE internacionales
de transición es que se benefician de la presencia de expertos electorales
internacionales con un reconocido conocimiento técnico en la materia y las
experiencias electorales comparadas. Este tipo de estructura resulta de gran
utilidad en situaciones de conflicto profundamente arraigadas, pues existe una
fuerte necesidad para construir consensos a través de la mediación y el
diálogo. La presencia de expertos internacionales dentro del OE puede fortalecer
la confianza en el proceso electoral por parte de los grupos de interés, tanto
acionales como internacionales.
Los OE de transición también pueden estar conformados
por expertos nacionales, principalmente representantes de los partidos
políticos: como fue el caso de los 53 miembros del OE en Indonesia en 1999.
Este organismo electoral fue de una magnitud mayor de lo normal para asegurar
la inclusión y representación de todas las fuerzas. En el año de 2001,
Indonesia reformó su legislación electoral para instaurar un OE permanente
formado por 11 expertos.