Un elemento importante de cualquier sistema de administración computacional es el servicio de ayuda de escritorio. La ayuda de escritorio tiene dos propósitos principales: resolver cualquier problema que los usuarios tengan con el sistema y ayudarles a utilizar el sistema de manera efectiva. La ayuda del escritorio también es responsable de autorizar el acceso de los usuarios al sistema mediante el uso de derechos de acceso y de contraseñas.
En los organismos electorales que son pequeños, la ayuda de escritorio podría ser suministrada por un solo oficial. En los organismos más grandes, la ayuda de escritorio podría requerir mucho personal. En algunos casos podrían existir varios equipos de ayuda dedicados a distintas funciones, o asignados a distintas oficinas regionales. La función de ayuda de escritorio puede cubrirse de forma interna o delegarse a contratistas externos. Esta ayuda también podría compartirse con otras agencias, especialmente cuando el gobierno comparte el mismo sistema de cómputo.
Generalmente, la ayuda de escritorio resulta más efectiva cuando es impartida por oficiales que tienen las capacidades necesarias para asistir de forma rápida, o que pueden buscar ayuda con personal especializado. En algunos casos, la ayuda se puede suministrar de forma inmediata. En otros, las peticiones tendrán que registrarse para que sean atendidas cuando el personal esté disponible.
Contar con una estructura formal contribuye a que el personal de apoyo pueda decidir que llamado atender, cuando las peticiones de ayuda tienen que priorizarse. Esta estructura formal resulta más efectiva cuando es negociada y acordada con los usuarios, de forma que sepan la prioridad que le deben dar a las llamadas y el nivel de ayuda que se espera.
Resulta de mucha utilidad que el equipo de ayuda ingrese y registre todas las peticiones de ayuda y que elabore registros sobre la clase y cantidad de solicitudes, así como del tiempo que se ocupó para suministrar la asistencia. Esto contribuye a que se identifiquen las áreas problemáticas que se deberían arreglar mediante capacitación, o con la mejora del equipo y procedimientos.