Una de las formas más seguras para disminuir el riesgo de utilizar la tecnología, es contar con sistemas de contingencia manuales o alternativos. De esta forma, si la tecnología principal falla parcial o totalmente, se dispone de la operación de un sistema de respaldo.
Un sistema de contingencia alternativo podría ser uno que se opera de forma manual, pero también podría incluir una copia de respaldo de la misma tecnología, un uso distinto de la misma tecnología, o una tecnología distinta.
El tipo de sistemas de contingencia manuales o alternativos que se pueden usar, varía tanto como el rango de usos que se pueden encontrar para aplicar la tecnología en el proceso electoral. Algunos de los sistemas de contingencia pueden incluir:
- El uso de computadoras personales o portátiles individuales que contengan el respaldo de la información en caso de que la red falle;
- El uso de papeletas impresas por si el sistema de votación electrónico falla;
- El escrutinio manual de las papeletas por si los medios electrónicos o mecánicos fallan;
- El uso de hojas impresas y de calculadoras manuales por si fallan los sistemas computarizados de escrutinio o de hojas de cálculo;
- El uso de formatos escritos a mano para reemplazar la captura de información en pantalla, en caso de que las computadoras fallen (de forma que el proceso continúe aunque no haya sistema -la información se podrá ingresar cuando se restablezca el sistema);
- El uso de sistemas de cómputo de espejo en los equipos y programas de respaldo por si el sistema central falla;
- Garantizar que se tengan fuentes energéticas alternativas por si la fuente central falla;
- Usar el fax, teléfonos o correo para transmitir los resultados electorales en caso de que la conexión por computadora falle;
- Emitir impresiones con los resultados electorales o con otra información por si los sistemas de despliegue en línea fallan (por ejemplo, durante el conteo en un lugar);
- Garantizar que se tengan presentadores equipados para que transmitan programas en vivo, en caso de que las presentaciones electrónicas fallen (por ejemplo, durante la capacitación);
- Tener el equipo alternativo disponible y en espera, para que se pueda usar y conectar a la menor necesidad.
Los sistemas de contingencia manuales o alternativos resultan más efectivos cuando están incluidos desde un principio en la estrategia general de la tecnología. El nivel de recursos que se destine a los sistemas de contingencia depende del nivel de riesgo que se tenga. También depende de la naturaleza crítica de la actividad electoral. Suministrar sistemas de contingencia resulta más importante cuando los riesgos son altos y el proceso es extremadamente sensible al tiempo.
El plan general de adquisiciones podría incluir cualquier equipo o formatos que se necesiten para los sistemas de contingencia, de manera que estén disponibles para usar durante el evento. Con suerte, estos no serán necesarios. No obstante, si se requieren habrán valido el gasto extra.