La incorporación de tecnología en países de menor desarrollo puede generar problemas especiales. Puede ser necesario emplear estrategias distintas a las que se utilizan en países desarrollados.
El ambiente físico local puede limitar la apropiación de algunas tecnologías. Un país con problemas en el suministro de energía eléctrica puede no ser el sitio más apropiado para instalar una amplia red de computadoras personales que requieren una fuente de energía confiable. Altos niveles de humedad, polvo o arena también pueden restringir la elección de la tecnología apropiada.
La infraestructura local debe ser capaz de soportar la tecnología seleccionada. Si no es así, es probable que el sistema falle o que se necesite instalar infraestructura especial para soportar la tecnología. Si es probable que falle el sistema, esto indicaría que la tecnología no es apropiada para las condiciones prevalecientes. Si se opta por instalar infraestructura especial, sus costos y beneficios deben ser cuidadosamente evaluados para asegurar que resulte rentable.
Puede ocurrir que las capacidades locales básicas no sean capaces de soportar la tecnología. hay dos formas de asegurar que se cuente con las capacidades necesarias: dotar al personal local de las habilidades requeridas a través de la capacitación o reclutar personal con las habilidades requeridas cuando sea necesario. La primera solución puede ser difícil de lograr en el corto plazo, pero será más sostenible en el largo plazo sí se alcanza. Es probable que la segunda solución tenga éxito en el corto plazo, pero puede resultar menos sustentable y propicia en términos de costo-efectividad en el largo plazo.
Ver también Sustentabilidad.
Otra falla potencial es la de tratar de hacer mucho demasiado rápido. En lugar de dar un salto de gran cuantía y aplicar una tecnología radicalmente nueva (comparada con la existente) en un solo paso, puede ser más apropiado aplicar el cambio gradualmente a lo largo de varios procesos electorales.