Uno de los usos más importantes de la tecnología es como un medio para informar a los electores sobre otra tecnología electoral. Hay dos aspectos esenciales en la información a electores sobre tecnología electoral: orientaros sobre como usar tecnología con la que pueden tener contacto durante el proceso de votación e informarles sobre la tecnología electoral a fin de obtener su respaldo y confianza.
Informar a los electores sobre el uso de tecnología para el proceso de votación puede ser considerado como un ejercicio de capacitación de los votantes. Los electores normalmente tienen una fugaz relación con el organismo electoral y una aún más breve con la tecnología electoral. Se puede capacitar a los electores en el uso de la tecnología durante esas breves interacciones, y todo puede diseñarse para hacerlo muy rápidamente. Quizá la mejor forma de capacitar a los electores es aquella de la que ni siquiera se percatan.
Para un examen detallado de esta cuestión, ver Capacitación de los Electores.
Cuando se está introduciendo una nueva tecnología electoral que afectará al público, es importante considerar a este como una parte interesada en el proceso y obtener su confianza en el nuevo sistema. Esto puede comprender una campaña de comunicación a gran escala para informar al electorado sobre los cambios propuestos (ver Educación Electoral). Antes de intentar una comunicación a gran escala, puede ser recomendable utilizar métodos de investigación de mercados para probar las propuestas con grupos de enfoque o muestras representativas de la población.
Para mayor información sobre la búsqueda de aceptación pública a la nueva tecnología electoral, ver Disposición para Asimilar la Tecnología.
