El proceso de implantación constituye el último eslabón de la metodología de desarrollo de implantación del proyecto y es posterior al proceso de prueba (ver Proceso de Prueba). A pesar de todo el trabajo requerido para llegar a este punto, la fase de implantación puede ser la más difícil.
Como con los procesos de desarrollo y prueba, la complejidad depende de las características de la tecnología. Si se trata de un producto estándar, la implantación puede ser relativamente fácil. Los usuarios también pueden estar relativamente familiarizados con ella si no difiere sustancialmente de la que se utilizaba con anterioridad.
Sin embargo, cuando se trata de una nueva tecnología, que no ha sido aplicada con anterioridad o difiere sustancialmente de las prácticas previas, el proceso de implantación debe ser manejado con extremo cuidado y mucha atención en los detalles.
La estrategia de implantación, que debe ser explicitada en el plan integral de administración del proyecto, fijará los pasos necesarios para probar la nueva tecnología. Una estrategia de implantación para una nueva tecnología de uso electoral puede incluir los siguientes elementos:
- Conferir la responsabilidad de la implantación a un comité técnico y a uno administrativo que resulten apropiados.
- Recibir formalmente la versión definitiva del sistema.
- Armar y desplegar el sistema según se requiera.
- Conducir las pruebas finales de todos los elementos de la versión definitiva.
- Introducir los ajustes que resulten necesarios y probar y aprobar cualquier cambio.
- Preparar la documentación necesaria, como manuales técnicos, para el usuario y materiales de capacitación.
- Reclutar o designar al personal que va a operar el sistema.
- Capacitar a los usuarios sobre el funcionamiento del nuevo sistema.
- De ser el caso, mostrar la operación del nuevo sistema a los interesados o implicados.
- De ser el caso, conducir campañas de información pública.
- Introducir la información en el sistema según se requiera (puede ser información fija, como la relativa a los sitios de votación o variable, como los resultados electorales).
- Es necesario verificar la información (por ejemplo, teclear la información dos veces y comparar ambas versiones o destinar a un segundo oficial para que revise la información introducida por otro operador, o efectuar 'revisiones lógicas' computarizadas de la información.
- Generar respaldos de los programas e información del sistema según se requiera antes del evento electoral.
- Controlar cualquier proceso de actualización, asegurándose de que se estén utilizando los equipos y programas apropiados.
- Darle mantenimiento al sistema.
- Asegurar que se encuentren disponibles los sistemas de respaldo, de ser necesario.
- Asegurar que se cuente con fuentes alternas de energía, de ser el caso.
- Operar el sistema durante el evento electoral.
- Asegurar que se cuente con equipos técnicos y de mantenimiento durante la operación para garantizar el éxito en su operación.
- Respaldar la información durante y después del evento electoral, según se requiera.
- Finalizar el evento electoral.
- Evaluar la operación del sistema y tener reuniones informativas con los usuarios.
- Preparar propuestas para mejorar o reutilizar el sistema en el próximo evento electoral.
- Darle mantenimiento al sistema según se requiera.
- Aplicar cualquier mejora aprobada.