La consolidación de resultados en sistemas de listas puede ser muy simple y directa o sumamente complicada, dependiendo del sistema y del marco legal.
En algunos casos, basta computar una vez los votos bien en la mesa electoral o en un centro de escrutinio, pero en otros casos puede ser necesario un segundo recuento. Si ello fuera necesario, el primer escrutinio normalmente se hace en la mesa electoral y el recuento en un centro de escrutinio.
En sistemas de lista cerradas, sin la posibilidad de votos preferenciales, acumulativos, etc. y simplemente una lista por partido, normalmente basta con un solo escrutinio. Los números de cada lista se añaden por distrito electoral, y los escaños se asignan a candidatos según el orden de la lista.
En sistemas más complejos, cuando un partido tiene más de una lista por distrito electoral o cuando el votante puede tachar, agregar candidatos o hacer marcas preferenciales, acumulativas etc. tanto el escrutinio como la consolidación de resultados son más complejos.
El número exacto de votos por cada lista y candidato, incluyendo los tachados, adiciones, etc. debe determinarse antes de poner en práctica la fórmula electoral para la asignación de escaños a los partidos y candidatos. Un procedimiento común en dichos sistemas es el escrutinio preliminar por partido en las mesas electorales, y un recuento posterior en centros de escrutinio a nivel de distrito electoral o a nivel regional.
En algunos sistemas debe llevarse a cabo una recopilación final de los resultados a nivel nacional, por ejemplo, para asignar escaños nacionales "igualadores".
A mayor complejidad del sistema y de las fórmulas electorales a ser empleadas, más importante será el aspecto de la transparencia del escrutinio. Las hojas contables, los informes del escrutinio y las compilaciones deben ser claras, exhaustivas y completas, y estar diseñadas de tal manera que el proceso íntegro pueda seguirse y pueda ser controlado por los partidos políticos y el electorado.
Toda la información pertinente debe publicarse sin retrasos. Sin embargo, es esencial hacer planes realistas para la última fase del proceso electoral y no crear expectativas exageradas cuando llegue el momento del anuncio de los resultados finales.
Cuando las autoridades de las elecciones publican los resultados finales debe incluirse en el anuncio las instrucciones sobre la forma de reclamar. Ver Representación Proporcional por Listas para información complementaria en este tema.