Desde 1947 hasta 1993 Japón usó lo que ellos llamaban el "sistema de distrito mediano" para elegir la más poderosa Cámara Baja del Diet. Este sistema puede ser mejor explicado como un sistema de Distritos Multi-Miembro (DMM), la extensión más simple de distritos uninominales (DUN). Cada votante tiene un solo voto y los candidatos líderes M son declarados electos, M es el número de escaños distribuidos al distrito. Precisamente, en la misma forma que el DUN es un sistema MR, DMM es un sistema MR-M. M tiene un rango de uno hasta seis, mientras que en la mayoría de distritos es de tres a cinco. El sistema Japonés produjo estilos de campaña similares a la del VUT en Irlanda y también es llamado Voto Unico No Transferible (VUNT).
Quejas acerca de DMM se enfocaron primero en el hecho que los errores estratégicos a menudo producían resultados anómalos. DMM era uno de los sistemas electorales raros en el cual un partido podía perder un escaño debido a un candidato particularmente popular: un partido con suficientes votos para ganar dos escaños en un distrito de tres miembros puede terminar de primero por un gran margen pero, dejar solamente suficientes votos para que el segundo candidato termine cuarto y, de esta forma sólo ganar un escaño. Mucho más importante, los partidos podrían perder escaños al correr demasiados candidatos: si el partido en el ejemplo anterior tuviera tres candidatos, dividiendo el voto balanceadamente entre ellos, podrían fácilmente terminar tercero, cuarto y quinto, ganando solamente un escaño. Sin embargo, tales resultados anómalos nunca fueron comunes, decayeron con el tiempo, lo ocurrió primordialmente cuando el apoyo de un partido subía o caía drásticamente en una sola elección.
El principal problema con DMM era que forzaba a los candidatos del mismo partido o del mismo campo a competir por votos. El partido dominante a lo largo de este período, el Partido Liberal Democrático (PLD) tuvo múltiples candidatos en la mayoría de los distritos. Un candidato del PLD que necesitaba unos cuantos votos adicionales para ganar, encontró más fácil atraer los votos de otros candidatos del PLD, que de cuaquiera de los partidos de oposición. La competencia intrapartidaria alimentaba el faccionalismo dentro del PLD. Mientras que las facciones del PLD se mantenían juntas por el poder, los partidos de oposición se fragmentaban a medida que competían por el voto progresivo. El Partido Socialista Japonés (PSJ), el partido de oposición más grande, encontró más difícil proponer múltiples candidatos. El DMM tendía a enmudecer a la competencia política entre campos ideológicos sobre política y a promover la competencia dentro de campos sobre servicios a los distritos.
Ya que el partido en el poder posee la ventaja en cualquier competencia para ejecutar cualquier servicio a los distritos, el DMM facilitó la dominación de un solo partido. El servicio de distrito también contribuyó a los serios problemas de corrupción los cuales, a su vez, finalmente llevaron al PLD a la derrota en la elección de 1993 y a una reforma electoral, la cual cambió el sistema electoral. Ambos, el proceso y el resultado fueron similares a los de Italia.
El nuevo sistema es el más simple de los Sistemas Paralelos RP/DUN, que recientemente han probado ser tan populares. 300 escaños son electos de DUNs y 200 de RP en once bloques, desde magnitud de distritos de 7 a 33. No hay mezcla de DUN y votos RP. La única conexión entre las dos partes del sistema es prohibir la doble candidatura, es decir,que un candidato pueda correr en un DUN y ser incluído en una lista RP. Los partidos pueden ordenar varios candidatos equitativamente en sus listas, permitiendo que se rompa el empate por los resultados de DUN.
El prohibir doblemente la doble candidatura, se volvió el foco de la críticas después de la primera elección bajo el nuevo sistema, en 1996. La queja original fue de que los candidatos vencidos en un DUN eran "revividos" por RP y los volvía "Zombies Dietmen". Un problema más serio es que algunos distritos ahora tienen un representante mientras que otros tienen dos, el ganador del DUN y el perdedor que ganó en RP. Unos cuantos distritos aún tienen tres, con dos perdedores DUN ganando escaños RP.
El proceso que lleva a la reforma política significó fugas del PLD, la caída de viejos partidos, el nacimiento de nuevos y una rápida sucesión de gobiernos de coalición improbables. Todavía es difícil, después de una sola elección, el distinguir entre los efectos del nuevo sistema electoral y los efectos de este desorden político.
La diferencia más clara es que los partidos políticos, ahora tienen solamente un candidato por distrito. Esto marca un mayor cambio para el PLD. En el pasado, cuando más de un candidato buscaba la nominación del PLD, la decisión a menudo se le dejaba a los votantes: dejen que todos los candidatos corran como independientes y quien gane formará parte del PLD. Esta opción es ahora más peligrosa. Los candidatos están tentados a aceptar el apoyo de otros partidos y el ganador podría no unirse al PLD. Esta tendencia ha sido visible por largo tiempo en elecciones gubernamentales y fue clara en bastantes distritos en la elección general de 1996. El PLD está haciendo rápidos progresos hacia el nombramiento de una sola persona como jefe de la oficina local, y así ser nominado como el prospecto para la próxima elección, en cada distrito. Hay también indicadores de que las facciones se han debilitado. El desorden político que rodeaba la reforma política conmovió a las facciones duramente, y ahora los candidatos ya no necesitan apoyo electoral en contra de sus rivales internos, hay un incentivo menos de reformarlos. Teóricamente, el sistema debería producir incentivos para que la oposición se coaligue alrededor de un solo candidato capaz de vencer al PLD, pero hasta ahora sólo hemos visto una fragmentación más profunda de los partidos de oposición. Ya sea que los incentivos hacia una competencia bipartidita sean debilitados por los 200 escaños RP o confundidos por los efectos del desorden político y se volverán más visibles al final.
Para terminar, reducirá el nuevo sistema la corrupción? Por un lado, los incentivos de crear un voto personal basado en el servicio a los distritos, han sido debilitados pero solamente un poco. Por otro lado, el potencial para la competencia de políticas entre los partidos ha crecido. Tendremos que esperar a ver como estos incentivos competitivos interactúan, aunque hasta ahora, los cambios sustantivos relacionados con la corrupción, no se han debido al nuevo sistema electoral sino que, a la nueva ley que establece, que las violaciones electorales pueden ser usadas para declarar nula una elección aunque el candidato no estuviere involucrado directamente en las violaciones.