Una desventaja del incremento de opciones que presenta el sistema paralelo, es que pueden crearse dos tipos de parlamentarios:
- Un grupo vinculado a los distritos y a los intereses de un electorado específico.
- Un segundo grupo escogido de las listas de partido, sin vínculos formales con los representados y que se sienten comprometidos esencialmente con los líderes de sus partidos
Además, el hecho que los sistemas paralelos no garantizan una proporcionalidad en general, significa que algunos de los partidos podrían carecer de representación parlamentaria, a pesar de ganar un número sustancial de votos. Los sistemas paralelos también son relativamente complejos y pueden provocar confusión entre los electores acerca de la naturaleza y operación del sistema electoral.