La elección del sistema electoral provoca una amplia gama de consecuencias administrativas y, en esencia, depende no sólo de la capacidad logística de una nación para llevar a cabo elecciones, sino también de la cantidad de dinero que el país puede invertir. Simplemente el escoger el sistema más sencillo y económico puede ser un falso ahorro a largo plazo, ya que un sistema electoral disfuncional puede tener un impacto negativo en el sistema político y la estabilidad democrática de una nación. La selección de un sistema electoral afectará un amplio rango de asuntos administrativos, los cuales se describen en los siguientes párrafos.
El trazado de los distritos electorales (ver Delimitación de Distritos)
Cualquier sistema basado en distritos uninominales exige un proceso largo y costoso para trazar los límites de pequeños distritos que se determinan en función del tamaño, cohesión, "comunidades de interés" y contigüidad de su población. Además, es muy raro el caso en que esta tarea se realiza una sola vez, ya que los límites son regularmente ajustados para reflejar cambios en la población.
Los sistemas de mayoría relativa (MR), voto alternativo (VA) y doble ronda (DR) son los que revisten los mayores problemas administrativos. Los sistemas de voto en bloque (VB), voto único no-transferible (VUNT), voto paralelo (VP), representación proporcional personalizada (RPP) y voto único transferible (VUT) también requieren que la delimitación de distritos electorales, pero son más fáciles de manejar porque usan distritos o circunscripciones plurininominales de mayor tamaño y en menor número.
En el otro lado de la balanza, los sistemas de representación proporcional son usualmente los más económicos y fáciles de administrar. Esto se debe a que utilizan un sólo distrito nacional, en cuyo caso no se requiere trazar límites, o bien distritos plurinominales muy grandes que se ajustan a los límites estatales o provinciales preestablecidos. Las elecciones transicionales de Sierra Leona en 1996 tuvieron que ser conducidas bajo un sistema nacional de RP por listas . La guerra civil del país y el consecuente desplazamiento de la población impidió que, aún habiéndolo deseado, las autoridades electorales contaran con la información poblacional necesaria para trazar distritos uninominales.
El registro de electores (ver Panorama General)
El registro de los electores es la parte más compleja, controversial y con frecuencia menos exitosa de la administración electoral. Esto se demostró en las elecciones de Zambia de 1996, donde menos de la mitad de la población en edad de votar fue registrada, a pesar de los esfuerzos desplegados por una empresa privada para llevar a cabo una campaña de inscripción de gran magnitud. Cualquier sistema que utiliza distritos uninominales usualmente requiere que todos los votantes estén registrados dentro de los límites del distrito. El movimiento natural de los votantes requiere, por tanto, una actualización continúa de los listados electorales.
Esto quiere decir que los sistemas paralelos (SP) y de representación proporcional personalizada (RPP), se suman a los de MR, VA y DR como los más costosos y administrativamente más complejos y laboriosos en términos del registro de electores. Los sistemas con un menor número de distritos plurinominales como los de voto en bloque, VUNT y VUT hacen el proceso un poco más fácil, mientras que las grandes circunscripciones pluriniminales de los sistemas de RP por lista son los menos complicados. En este contexto, la simplicidad de la lista regionales del sistema de RP fue un factor que contribuyó a su adopción en las elecciones transicionales, de Camboya en 1993, apoyadas por las Naciones Unidas, así como en las primeras elecciones democráticas de Sudáfrica en 1994, ver Sudáfrica: Sistemas Electorales y Manejo de Conflictos. Sin embargo, debe enfatizarse que las variaciones de los sistemas electorales solamente tienen un impacto pequeño en el con frecuencia extremadamente costoso registro de los electores, ver Definición de los Métodos del Registro de Electores.
El diseño de las papeletas de votación
Las papeletas de votación (ver Logística Electoral) deben ser tan sencillas como sea posible para todos los votantes a efecto de incrementar la participación y reducir el número de votos inválidos o "desperdiciados". Esto a menudo supone el uso de símbolos, fotografías y colores para partidos y candidatos (en la sección de materiales muestra del tema relativo a la logística electoral se incluye una buena cantidad de ejemplos interesantes de papeletas de votación). Con frecuencia, las papeletas asociadas a los sistemas de MR y VA son las más fáciles de imprimir y, en la mayoría de los casos, contienen un número relativamente pequeño de nombres.
Las papeletas del sistema de DR son igualmente sencillas, pero en muchos casos se deben imprimir nuevas papeletas para una segunda ronda de votación., duplicando así el costo de producción. De igual manera, los sistemas de RPP y paralelos usualmente requieren la impresión de por lo menos dos papeletas, aún y cuando las dos sean para la misma elección. Las papeletas empleadas en los sistemas VUNT, VUT y VB son un poco mas complejas que las de los sistemas de RPP, porque contienen mas candidatos y, por consiguiente, más símbolos y fotografías (si se acostumbra incluirlas). Las papeletas de los sistemas de RP por listas pueden prolongar el continuum de la complejidad. Pueden ser muy simples, como en un sistema de lista cerrada, o muy complejas como en el sistema de listas abiertas de Suiza, ver Suiza.
Educación al votante (ver Educación al Votante)
Evidentemente, la naturaleza y requerimientos de educación a los votantes, (ver Educación Electoral) varían significativamente de sociedad a sociedad; pero cuando se refieren al llenado de las papeletas de votación, existen diferencias identificables entre cada sistema. Los principios bajo los que operan los sistemas de voto preferencial, tales como los de VA o VUT, son bastante complejos cuando se aplican por primera vez. La educación al votante debe atender este asunto, particularmente si hay requerimientos obligatorios de enumeración de las preferencias, como en el caso en Australia, ver El Voto Alternativo en Australia . Lo mismo vale decir para los sistemas de RPP: después de 50 años de usar un sistema de este tipo, muchos alemanes todavía conservan la percepción errónea de que sus dos votos son iguales; cuando en realidad es el segundo, el de "RP nacional", el que determina la fuerza de los partidos en el parlamento, ver Alemania: El Sistema Original de Representación Proporcional Personalizada. En contraste, los principios tras los sistemas categóricos de voto único, como los de MR y VUNT, son bastante fáciles de entender. Los otros seis sistemas restantes se ubican en algún punto entre estos dos extremos.
El número y sincronización de las elecciones
Los sistemas electorales de MR, VA, VB, RPL y VUT generalmente requieren que la elección se verifique en un mismo día, ver Tamaño del Parlamento. Sin embargo, los sistemas paralelos y de RPP esencialmente mezclan dos (o más) sistemas electorales muy diferentes y, por tanto, tienen implicaciones logísticas en la capacitación de oficiales electorales y en la forma en que la gente vota. Los sistemas de doble ronda (mayoría absoluta) son tal vez los más costosos y difíciles de administrar, porque a menudo requieren que todo el proceso electoral sea replicado una semana o dos después de la primera votación.
El escrutinio (conteo o recuento)
Los sistemas de MR, VUNT y los simples de RP con listas cerradas. son los más fáciles de contar, ver Escrutinio de Votos, ya que sólo se necesita una cifra total de los votos de cada partido o candidato para obtener los resultados. El voto en bloque requiere que los oficiales de las mesas de votación contabilicen varios votos emitidos en una sola papeleta. Los sistemas paralelos y de RPP casi siempre requieren el conteo de dos papeletas. Los sistemas preferenciales, como los de VA y VUT , que requieren que se enumeren los votos marcados en la papeleta, son más complejos de contar, particularmente en el caso de VUT que requiere continuos re-cálculos de los excedentes de valores transferibles.
Básicamente son la historia, el contexto, la experiencia y los recursos los que determinan el nivel de presión que un sistema electoral impone sobre la capacidad administrativa de un país. En lo que concierne a los costos potenciales de los distintos sistemas, un ejercicio preliminar realizado para efectos de este documento considerando algunos factores básicos, permite establecer que los sistemas de RPL , especialmente los de lista nacional cerrada, son los menos costosos de operar y los que requieren menos recursos administrativos. Luego vienen los sistemas de MR y VUNT, seguidos por los de el voto en bloque, VA, VUT, paralelos y RPP. De acuerdo con estos cálculos, el sistema que mayor presión impone sobre la capacidad administrativa de un país es el de doble ronda.