Las elecciones parlamentarias y provinciales de la Asamblea Nacional que se tuvieron en Sudáfrica en 1994, marcaron el clímax de un período de cambio tumultuoso del mandato autoritario a una democracia multi-partidista en el Sur de Africa entera. A la medianoche del 27 de Abril de 1994, se bajó la última y quizás la más odiada bandera colonial en Africa, indicando el final de 300 años de colonialismo y cuatro décadas de Apartheid. Estas primeras elecciones democráticas multi-partidarias abrieron la etapa a aquellos movimientos políticos, que habían sido obligados a esconderse por la política del régimen de Pretoria, de mandato y división racial.
El Congreso Nacional Africano (African National Congress-ANC) de Nelson Mándela, se balanceaba en el umbral del poder, el Congreso Panafricano de Azania (CPA) lo desafiaba dentro de la misma comunidad, mientras que el Partido de Libertad Inkatha (PLI) de Mangosotho Buthelezi esperaba construir su hegemonía en el norte de la provincia KwaZulu/Natal. Estos nuevos partidos se unieron al Partido Nacional (PN) de De Klerk, el partido Liberal Democrático (PLD) y el nuevo Frente de Libertad (FL) - un descendiente de los partidos de la "derecha blanca" de la vieja dispensación constitucional - en la batalla por los votos de 35 millones de personas recién registradas.
Las elecciones fueron conducidas bajo una forma de lista nacional de RP, para la mitad de la Asamblea Nacional (200 miembros) siendo electa de 9 listas provinciales y la otra mitad de una sola lista nacional, ver Representación Proporcional por Listas. En efecto, el país usó un distrito nacional (con 400 miembros) para la conversión de votos en escaños, y no se impuso umbral de representación.
La cuota Droop fue usada para dividir escaños y, bonos de escaños, fueron otorgados por una adaptación del método del residuo más grande. Bosquejos anteriores de la ley electoral pusieron el umbral para la representación parlamentaria en el 5% del voto nacional, pero en una concesión a los partidos más pequeños, el Congreso Nacional Africano y el Partido Nacional se pusieron de acuerdo a principios de 1994 para deshacerse de cualquier umbral "obligatorio". Sin embargo, sólo aquellos partidos con 20 o más MPs, cinco por ciento de la Asamblea, tenían garantizados ministerios y dependencias, en el gabinete del primer gobierno de unidad nacional.
El hecho que el movimiento de liberación de Mándela no habría ganado las elecciones de la Asamblea Nacional, bajo casi cualquier sistema electoral, no niega el hecho de la importancia de la elección de Sudáfrica de un sistema de lista RP para éstas primeras elecciones. Muchos observadores clamaban que un sistema RP, como parte integral de los mecanismos de división de poder en la nueva constitución, era crucial para crear la atmósfera de inclusión y reconciliación, la cual hasta ahora ha llegado a detener el intento de la peor violencia política, y ha hecho la Sudáfrica post-Apartheid un faro de esperanza y estabilidad para el resto de la Africa emproblemada.
Sin embargo, en 1990, a la salida de prisión de Nelson Mándela no había razón particular para creer que Sudáfrica adoptaría RP. El parlamento "solo blanco" siempre había sido electo por un sistema de Mayoría Relativa, mientras que el CNA, ahora en una poderosa posición para negociar, esperaba contar con una clara ventaja si se mantenía el MR. Ya que sólo cinco distritos de más de 700 en Sudáfrica tenían mayorías blancas, debido a los caprichos del voto de MR, el CNA con sólo el 50% del 60% del voto popular, esperaba ganar fácilmente 70% u 80% de los escaños parlamentarios. Pero el CNA no optó por esta acción, porque se dió cuenta que las desigualdades de un sistema electoral donde "el ganador se lleva todo" desestabilizaría fundamentalmente los intereses de la mayoría y de la minoría a largo plazo, ver Negociaciones.
La lista RP también evitaba la controversia política de tener que trazar límites de distrito y además, encajaba con el poder ejecutivo - el ethos de compartir, el cual tanto el CNA como los Nacionalistas vieron como una clave trascendental de la Constitución interina. Hoy en día, todos los partidos grandes apoyan el uso de RP, aunque hay diferencias sobre que variante en particular se usará.
Es probable que aún con sus bolsones geográficos de apoyo electoral el Frente de Libertad (9 escaños en la Asamblea Nacional), el Partido Democrático (7 escaños) el Congreso Pan-Africanista (5 escaños) y el Partido Demócrata Cristiano (2 escaños) podrían no haber conseguido un sólo escaño parlamentario si las elecciones se hubieran celebrado bajo un sistema electoral MR de distrito uninominal. Mientras que estos partidos juntos únicamente representan seis por ciento de la nueva Asamblea, su importancia dentro de las estructuras de gobierno es más importante y significativa que su fuerza númerica.
Una lectura detallada de los resultados, revela sorprendentemente, que la lista RP podría no haber dado ventajas al mediano Partido Nacional (PN) ni al PLI, más allá, del número de escaños que ellos habrían esperado ganar bajo un sistema MR. Esto fue primordialmente debido a la naturaleza de "referéndum nacional" de la campaña, la cual llevó a una batalla de dos partidos entre lo viejo y lo nuevo, el CNA vrs el PLI en la provincia de KwaZulu-Natal, y el CNA vrs el PN, en el resto del país.
Además, la naturaleza étnicamente homogénea de los distritos y las fuertes concentraciones de apoyo en Sudáfrica, significó que el PN y el PLI habrían ganado solamente unos cuantos escaños bajo un sistema de distrito. Sin embargo el MR podría haber dado al CAN, con toda razón un pequeño "bono de escaños", incrementando su distribución del parlamento más alla de su distribución del voto popular (la cual era del 62%) y más allá de los dos tercios de mayoría, necesarias para trazar la nueva constitución sin referencia a los otros partidos.
La práctica de tener una papeleta para la Asamblea Nacional y una para el parlamento provincial, también probó ser una importante innovación en el diseño del sistema electoral. Hasta unos pocos meses antes de la elección, el CNA todavía insistía en una sola papeleta, la cual habría contado para ambas elecciones, provinciales y nacionales. Esta fue una clara maniobra para aventajar a los partidos más grandes, nacionalmente basados y, sólo se modificó por la presión de una alianza de líderes de empresariales, el Partido Democrático y los asesores internacionales.
Los resultados eventuales mostraron que grandes números de votantes habían dividido sus papeletas provinciales y nacionales entre dos partidos, y parece como si los mayores beneficiarios de la doble papeleta fueron el pequeño Partido Democrático y el Frente de Libertad. Ambos partidos lograron más de 200,000 votos en las elecciones provinciales, mucho más allá de su resultado nacional, lo cual explica la caída de 490,000 de los totales nacionales y provinciales del PN.
La elección de sistema electoral también tuvo impacto sobre la composición del parlamento a lo largo de líneas étnicas y de género. La Asamblea Nacional Sudafricana, envestida en Mayo de 1994, contenía más de 80 ex miembros del parlamento de sólo-blancos, pero hasta allí llegaban las similitudes entre lo nuevo y lo viejo. En directo contraste a la emproblemada historia de Sudáfrica, los negros se sentaron con los blancos, los comunistas con los conservadores, Zulús con Xhosas, y Musulmanes con Cristianos. El grado significativo la diversidad de la nueva Asamblea Nacional, fue un producto del uso de lista RP.
Las listas inalterables de candidatos nacionales, permitieron a los partidos presentar grupos de candidatos étnicamente heterogéneos, los cuales, se esperaba, serían ampliamente llamativos. La Asamblea Nacional que resultó era 52% negra, incluyendo gente de habla de Xhosa, Zulu, Sotho, Venda, Tswana, Pedi, Swazi, Shangaan, y Ndebele, 32% blanca (de habla inglesa y Afrikaans) 8% Indio, y 7% de color. Esto comparado a un electorado, el cual se estimó era 73% negro, 15% blanco, 9% de color y 3% Indio. Las mujeres comprendían el 25% de la membresía total del parlamento. Había una fuerte creencia en Sudáfrica, que si MR hubiera sido usado, habrían habido menos mujeres, Indios y blancos, habiendo más negros y hombres MPs.
Finalmente, habríamos esperado más formas de representacion polarizadas bajo MR, con blancos (de diferentes partidos) representando distritos de mayoría blanca, Xhosas representando Xhosas, Zulús representando Zulús, etcetera. Mientras existen problemas con la confianza en la responsabilidad de los representantes, bajo el presente sistema de lista RP, en Sudáfrica, esto ha significado que los ciudadanos tengan una variedad de MPs a los que acercarse cuando la necesidad surge.
Sin embargo, hay un contínuo debate en Sudáfrica acerca de como incrementar la confiabilidad democrática y la representacion de los miembros del parlamento. Fue ampliamente aceptado que la primera elección no racista era más que nada un referéndum acerca de cuales partidos redactarían la nueva constitución. Pero posteriores elecciones deberían celebrarse con el propósito de constituir un parlamento representativo, y muchos actores políticos comparten la idea que el sistema electoral necesita ser modificado y tomar esto en cuenta. Sin incrementar grandemente la dificultad de la papeleta, a los votantes se les pueden permitir escoger entre los candidatos así como entre los partidos, sin que el carácter RP del parlamento sea afectado en forma alguna.
Una opción es elegir MPs en pequeños distritos multi-miembros, para poder mantener un tipo de lista-vínvulo geográfico entre los electores y sus representantes. Al momento de que las listas regionales representen áreas más grandes, cualquier forma de promoción local, está totalmente perdida. Una segunda opción es adoptar el sistema de MMP donde la mitad de los miembros son electos de distritos uninominales y la otra mitad sale de listas RP compensatorias. Finalmente, como una segunda consecuencia del caos administrativo que caracterizó las elecciones de Abril de 1994, las listas de votantes también se necesitan para permitir que las autoridades delimiten los distritos apropiadamente y asegurar que grandes números de votantes no sean movidos a través de los límites, para manipular los resultados de la eleccion.