La principal responsabilidad de promover una cobertura profesional de las elecciones reside en los propios medios. El papel de la autoridad electoral es, fundamentalmente, el de crear un entorno favorable para que eso ocurra.
Sin embargo, hay diversos aspectos de la cobertura editorial donde pueden existir disposiciones expresas sobre lo que los medios pueden decir o no y que, consecuentemente, involucran a la autoridad encargada de su regulación. Esas disposiciones pueden comprender las siguientes áreas:
Cobertura de las Encuestas de Opinión
Muchos países cuentan con regulaciones expresas de como informar sobre las encuestas de opinión por cierto, en algunos casos, como Francia por ejemplo, está prohibido difundir los resultados de las encuestas. Sin embargo, como Francia misma lo está descubriendo, la prohibición total de informar sobre encuestas de opinión ya no constituye una disposición práctica. El argumento a favor de algún tipo de regulación reside en que, en especial en las democracias emergentes, el público puede no tener plena conciencia de las limitaciones de las encuestas y puede ser indebidamente influenciado por sus resultados. Por otra parte, es probable que se logre desarrollar una cobertura más profesional en esta área mediante la publicación de lineamientos sobre como informar acerca de las encuestas de opinión (ver Preguntas que Hacer sobre las Encuestas de Opinión), que prohibiendo su manejo.
Programación de Información Especial
El área de cobertura donde suele considerarse necesario algún tipo de regulación es el de la "programación especial"-, que normalmente comprende los debates entre candidatos y las entrevistas en mesa redonda. Algunos países con gran tradición en este campo han desarrollado formatos estandarizados para esta clase de programas sin regulación externa alguna. Otros, especialmente las democracias emergentes, han desarrollado reglas detalladas para asegurar que todos los participantes en el debate tengan un acceso equitativo.
Actividades y Campañas Gubernamentales
Una forma en la que normalmente se abusa de la cobertura electoral consiste en la manipulación de las funciones de gobierno para propósitos de campaña. De ahí que muchos funcionarios o representantes que buscan su reelección se esfuercen por acaparar la atención del electorado por medio de sus actividades oficiales. Esto sucede en todas las democracias del mundo y, en buena medida, puede dejarse al buen criterio profesional de los medios mismos. Sin embargo, especialmente en aquellos casos en que los medios están habituados a cubrir cualquier actividad de los altos funcionarios del gobierno, puede ser necesario fijar algunos lineamientos para prevenir abusos.
Bloqueos Informativos/'Periodo de Reflexión'
Muchos países imponen un período de suspensión noticiosa en algún momento del proceso electoral. En la mayoría de los casos esto ocurre una vez que se inicia la votación, a fin de evitar campañas tendenciosas o abusivas de último minuto. Algunas veces la veda puede imponerse desde algunos días antes de las elecciones para que los electores cuenten con un "período de reflexión" para analizar toda la información que han recibido en el transcurso de las campañas.