Anulación de una elección
Hay dos razones fundamentales para que la elección de un candidato sea declarada nula:
- La administración de una elección pudo haber sido tan irregular como para generar dudas fundadas sobre la validez de sus resultados
- Un candidato puede perder su escaño por hacer trampa (por ejemplo, exceder los límites de gastos de campaña).
El más reciente ejemplo británico de una administración electoral plagada de irregularidades data de 1874. En la demanda de la elección del Caso Hackney, las irregularidades administrativas consistieron en que dos mesas de votación nunca abrieron y otras fueron cerradas durante varios momentos del día, con lo que una alta proporción de los votantes potenciales no pudieron ejercer su derecho al voto.91
La "Ley para las Elecciones de los Diputados del Pueblo de Ucrania" incluye una disposición en su artículo 47 para una eventualidad similar:
La Comisión Central de Elecciones puede declarar unas elecciones...como nulas si durante su desarrollo o en el escrutinio de los votos hubiera violaciones de esta ley, que hubieran influido de manera substancial en los resultados de la votación...Las decisiones de la Comisión Central Electoral pueden ser apeladas ante la Suprema Corte de Ucrania, cuya decisión es final.92
El ejemplo central concerniente a la pérdida del escaño parlamentario por un candidato ganador que ha sido encontrado culpable de un delito durante la campaña, es el de la ley británica relacionada con los límites de gastos por los candidatos y sus representantes. El hecho de que desde 1920 esta ley no haya provocado la pérdida de un escaño en la Cámara de los Comunes puede ser interpretada diferentes formas--ya sea como un signo de su efecto disuasivo, o como un indicador de su pobre aplicación. Posiblemente hay algo de verdad en ambas interpretaciones.
Suspensión de los derechos cívicos
Es posible sostener que no se puede confiar en que alguien que ha cometido una serie violación a la ley electoral va a cumplir con sus deberes cívicos en el futuro, y que no sería alguien digno de postularse como candidato a un cargo público. Sobre estas bases, la ley electoral británica impone sanciones civiles especiales:
Cualquier persona declarada culpable de una práctica corrupta por una corte electoral está sujeta a las siguientes incapacidades: (1) Incapacidad por cinco años para ser registrado como elector o votar en cualquier elección parlamentaria o local en el Reino Unido. (2) Incapacidad por cinco años para ser elegible para un escaño en la Cámara de los Comunes o (3) o asumir un cargo público o judicial.
Un candidato declarado personalmente culpable de una práctica corrupta por una corte electoral está además (4) impedido legalmente durante diez años para ser elegido en la circunscripción en la que se realizo la elección. Sin embargo, (5) si el delito fue cometido por el representante del candidato, el impedimento legal para el candidato es por solo siete años.
Los jueces de paz, miembros de ciertas profesiones (tales como abogados, clérigos y doctores) y las personas que tienen licencias para venta de licor están sujetos a otras acciones, si son procesados por prácticas corruptas relacionadas con las elecciones.
Se aplican sanciones cívicas menores a los sentenciados por los delitos de menor jerarquía descritos como prácticas "ilegales".93
Antes de 1996, los candidatos japoneses nombraban un agente o representante de campaña con objeto de que asumiera las responsabilidades, e incluso de que fuera a la cárcel, por violaciones a las leyes de campañas . La versión de 1996 de la ley hace responsable al candidato mismo. Hay un vacío o insuficiencia en la ley, ya que prohíbe a un candidato convicto postularse durante cinco años en el distrito en el cual fue elegido. Pero no le prohíbe contender por otro distinto, o en una elección diferente.