Debido a que el registro electoral es un área donde es posible manipular los resultados electorales, hay que prestar especial atención para asegurar que el padrón sea preciso y confiable. Un padrón confiable implica que todos los votantes estén registrados, que sólo aparezcan una vez y que sólo se incluya a las personas elegibles.
Crear y mantener un padrón electoral preciso requiere supervisión constante y múltiples revisiones, que incluyen actualizar los registros, eliminar la duplicación y quitar a los votantes que ya no residen en ese distrito electoral. También es importante aplicar las leyes contra el fraude y de registro electoral, ya que disminuyen futuros fraudes a la vez que aseguran que las personas que han roto la ley sufran las consecuencias de sus actos.
Asegurarse de que sólo los electores elegibles se registren
Algunos partidos políticos y candidatos se esfuerzan para asegurar que sus partidarios queden incluidos en el padrón electoral. Debido a ello, pueden ofrecer incentivos para que éstos se registren, tales como transporte a las oficinas de registro, o promesas de beneficios para el área una vez que el candidato gane y ocupe el cargo público. Sin embargo, cuando los partidos y los candidatos transportan a los ciudadanos para que se registren en otros distritos electorales o traen a personas no elegibles a registrar, pueden surgir graves conflictos de integridad.
En Kenia, por ejemplo, ha sido frecuente transportar a los ciudadanos para que se registren en otros distritos para manipular el proceso. De acuerdo con David Throup, "en diciembre de 1992, no se emplearon medios burdos para "arreglar" las elecciones. En lugar de ello, la administración provincial las "arregló" seis meses antes de la elección general, durante el proceso de registro. Los partidarios de KANU fueron transportados en camiones desde los bastiones rurales del partido hacia las sedes marginales en Nairobi y Mombasa".147 En muchos sistemas aplican requerimientos de residencia para evitar el problema del registro fuera del área correspondiente.
Algunas personas que no son ciudadanos o adultos pueden intentar registrarse para tratar de obtener varias credenciales. Pueden registrarse con su nombre en varias localidades, o usar nombres falsos. En la mayoría de los sistemas, estas personas son detectadas gracias al requisito de mostrar prueba de identidad o de ciudadanía. Estos requisitos se usan con mayor frecuencia en países en que hay una gran desconfianza en el sistema electoral o en los que ha habido mucho fraude electoral en el pasado. Sin embargo, si demostrar la identidad se convierte en algo tan oneroso que desalienta a los votantes potenciales, este requisito puede convertirse en un conflicto de integridad.
Es posible evitar este conflicto solicitando documentos fácilmente disponibles, tales como una credencial de identificación nacional, un acta de nacimiento o un pasaporte. Añadir una alternativa puede ayudar a quienes carecen de papeles porque éstos fueron destruidos en la guerra o quienes nunca han recibido actas de nacimiento u otros papeles gubernamentales. Por ejemplo, en las elecciones de 2000 en Haití, dos electores registrados podían responder por una tercera persona sin papeles. Los números de registro de dos personas que respondan por el elector se anotan en el registro y se les considera responsables de la exactitud de su garantía.
Asegurarse de que haya integridad y precisión en los registros y en las credenciales de los electores
En la mayoría de los sistemas hay un padrón electoral que se usa el día de la jornada electoral para decidir quién puede votar. Normalmente, dado que sólo las personas que aparecen en él pueden votar, el padrón debe ser preciso y estar protegido contra la manipulación. En algunos sistemas, este padrón cuenta con el apoyo de credenciales que se distribuyen a los electores durante el registro. Estas credenciales demuestran que la persona ha solicitado su inclusión en el padrón, la cual ha sido aceptada. El elector debe presentar la credencial en las mesas de votación para poder votar.
Puesto que las credenciales electorales se usan como mecanismos de integridad, normalmente incluyen características de seguridad para evitar las falsificaciones y el uso o la duplicación no autorizados. Estas características de seguridad incluyen números de serie para que los administradores electorales puedan rastrear las credenciales, y en casos donde el fraude en el registro ha sido un problema significativo, se pueden usar marcas de agua o papel especial para dificultar la duplicación. Algunos sistemas incluyen huellas digitales o fotografías para asegurarse de que nadie más pueda usar la credencial. Estas fotografías y huellas digitales se pueden incluir también en el padrón electoral.
Los listados electorales incluyen números de serie para que las autoridades electorales puedan rastrear los registros y saber si alguno está extraviado. Se hacen por duplicado o triplicado para que tanto la oficina electoral local como la regional y la nacional puedan contar con un ejemplar. Esto puede disminuir la manipulación interna, tal como añadir o eliminar nombres, ya que sería difícil asegurar que estos cambios se hicieran en todos los ejemplares. Las listas de registros también se colocan en lugares públicos para que los ciudadanos, los partidos políticos y los monitores puedan verificar los nombres. Se da un periodo en el calendario electoral para que se hagan las correcciones necesarias en los listados de registro.
Los padrones electorales deben ser precisos y estar actualizados. Por ejemplo en San Francisco, un gran jurado descubrió en 1988 que había 1,800 personas fallecidas que aparecían como votantes elegibles en los padrones. 148 Antes de las reformas electorales en México, el padrón electoral se usaba como herramienta para el fraude electoral -disminuyendo los votos de algunos segmentos de la población y aumentando los de otros. Una de las reformas consistió en asegurar un padrón electoral exacto. Se establecieron estándares específicos en la ley electoral para dificultar la duplicación de registros, así como los estándares para el almacenamiento y la destrucción de las credenciales y registros echados a perder. Durante el registro, los partidos políticos firman las credenciales electorales para validarlas, y se imprime la huella digital del dedo pulgar del votante en cada credencial durante la votación para evitar el voto múltiple. 149
Monitorear
El monitoreo del registro electoral y el uso de las credenciales durante la jornada electoral proporciona una revisión a la distribución y uso de las credenciales. Los observadores nacionales e internacionales (ver Supervisión de la Integridad de la Elección) que observan el proceso y los monitores de los partidos políticos que pueden cuestionar el proceso, actúan para exponer los problemas y sirven para evitar el registro o el uso fraudulento de credenciales. Según Horacio Boneo, ex-director de la División de Asistencia Electoral de la ONU, la "mejor forma de minimizar algunos tipos frecuentes de fraude y manipulación que se llevan a cabo durante el registro de los electores y la jornada electoral es asegurando la presencia de gran cantidad de observadores independientes y de partido en cada lugar donde los electores se registren y en cada mesa de votación." 150
Los ciudadanos independientes también pueden actuar como monitores y contribuir a asegurar un registro limpio. Pueden observar las listas de registro puestas en sitios públicos y cuestionar el registro de personas que no parezcan elegibles. En Nueva Zelandia, cada Registrador de la Oficina Electoral tiene un ejemplar del padrón electoral nacional completo, y cada oficina de correos tiene un ejemplar de la lista local, que está abierta a la inspección pública. 151 Este es el caso en la mayoría de los lugares, a excepción de sistemas tales como el danés, donde las listas de electores están basadas en el registro civil y no se comparten con partidos políticos, con otros votantes o con la sociedad civil.
Aplicar las leyes de registro
La aplicación de las regulaciones electorales y las disposiciones contra el fraude en la ley electoral son mecanismos esenciales de supervisión para un registro de electores limpio y preciso. En casi todos los sistemas electorales, es ilegal manipular el proceso de registro de electores y los padrones electorales. La violación a estas leyes se maneja a través del sistema legal - que en la mayoría de los casos de fraude es el sistema de justicia de lo criminal. Para mayor información, ver Aplicación de la Ley sobre Integridad Electoral.