Los observadores de los partidos políticos son un componente esencial para obtener y mantener la integridad. Según el Instituto Internacional para la Democracia y la Asistencia Electoral (IDEA):
El papel de los partidos políticos en la observación electoral es crucial, ya que los partidos son a quienes más les interesa el monitoreo en un proceso electoral. Son quienes están en mejor posición para evaluar el ambiente político, identificar los impedimentos a la libertad de hacer campaña, las implicaciones de la elección del sistema electoral, etc. Además, los partidos fuertes que pueden establecer una presencia nacional en las mesas de votación para el día de la elección están por lo general en una postura más adecuada para actuar como obstáculo para las irregularidades y los intentos de manipulación. 261
Los observadores de los partidos políticos son los agentes de los partidos y los candidatos que participan en la elección. Como tales, se les confiere la autoridad en la mayoría de los sistemas no sólo para monitorear el proceso electoral, sino también para intervenir si piensan que no se están respetando los requisitos legales. Asimismo, pueden ser una parte integral del proceso administrativo ya que validan papeletas y hojas de conteo mediante su firma y su participación en la administración y el escrutinio. Aunque éste es un papel voluntario en la mayoría de los sistemas, hay casos en que ni la votación ni el escrutinio se realizan sin la presencia de los observadores de los partidos políticos.
Los papeles que desempeñan los observadores y los candidatos difieren. Los candidatos hacen campaña activamente con el propósito de convencer a los electores de que voten por ellos. Los observadores son espectadores, y no deben intentar influir sobre el voto de quienes observan. El monitoreo se hace de manera imparcial y profesional. El código de conducta para los partidos políticos en Sudáfrica subraya la diferencia en los papeles entre los monitores y los candidatos, y en cómo deben los candidatos dejar el monitoreo a sus agentes:
La presencia de los candidatos genera peligro de tensión y conflictos crecientes. Incluso si los candidatos se comportan de manera amenazante, los electores pueden sentirse intimidados por su presencia y perder la confianza en el secreto del voto, especialmente en áreas caracterizadas por conflictos y violencia entre partidos. Por lo tanto, la reglamentación electoral debe prohibir la presencia de candidatos dentro del perímetro interior de la mesa de votación, siguiendo la práctica internacional.
Los agentes de los partidos que están bien capacitados en diversos aspectos de la ley electoral y sus reglamentos, serán los más aptos para monitorear el procedimiento y proteger los intereses de los partidos. Sin embargo, su papel sólo será constructivo si estos agentes comprenden exactamente lo que se espera de ellos, cuáles son sus derechos y responsabilidades y lo que se les permite hacer. Los partidos políticos deben asegurarse de que todos sus agentes estén bien capacitados y preparados para cumplir con el Código de Conducta Electoral y los reglamentos adicionales.262
Para proteger la integridad del proceso y los intereses de su partido y sus candidatos, los observadores habitualmente:
- Revisar que la lista de registro de los electores, para asegurarse de su exactitud; que los electores existan, que no haya registros repetidos ni de personas no elegibles. El observador también puede verificar que los simpatizantes de sus partidos puedan registrarse sin interferencia u otros problemas;
- Hacer averiguaciones tan pronto como ocurra algo irregular o sospechoso durante el registro, la votación o el escrutinio. Esto se hace mediante el proceso oficial de quejas, usando las formas adecuadas y anexando la documentación de apoyo requerida. También pueden enviar una copia de la queja a su partido político o candidato, a los grupos nacionales e internacionales de observadores y a los medios;
- Firmar los registros electorales y las hojas de conteo para verificar la exactitud de la información en los reportes. Si hay discrepancias entre el reporte oficial y lo que los observadores han percibido, éstos pueden declarar su desacuerdo en el formulario oficial. Los observadores deben obtener una copia de las hojas que hayan firmado;
- Emprender un escrutinio paralelo usando copias de las hojas de conteo recopiladas de todos los sitios electorales monitoreados. El escrutinio paralelo puede compararse a los resultados oficiales y las diferencias deben reportarse de inmediato a través del mecanismo oficial de quejas. Se anexan a la queja copias de las hojas de conteo para los sitios en disputa. Los observadores nacionales e internacionales, así como los medios, pueden recibir una copia de la queja;
- Validar los materiales electorales para certificar que son oficiales y están correctos. Este puede ser un mecanismo como firmar al reverso de la papeleta antes de entregarla al votante para certificar que es oficial y está en blanco, y al asegurar que sólo esas papeletas con sus firmas pueden contarse como papeletas válidas; y
- Firmar los resultados oficiales para certificar su exactitud, y que reflejen fielmente la consolidación de los votos.