Estos códigos usualmente son un grupo de reglas escritas que regulan la conducta de los funcionarios públicos, incluyendo los administradores electorales. Ciertos sistemas electorales incluyen códigos de ética para regir la conducta de los partidos políticos, los candidatos y los grupos de presión . Estos códigos están diseñados para prevenir el comportamiento inmoral. (ver Comportamiento Ético) y, si está legalmente establecido, puede obligar a los funcionarios a cumplir con sus acciones individuales.
Los códigos de ética y de conducta pueden ser independientes o formar parte de un conjuto de leyes. Por ejemplo, la Ethics and Disclosure Act, Wyoming 84 forma parte de un grupo de leyes sobre el servicio público, que regulan también a los administradores electorales de Wyoming. En Sudáfrica, el Código de Conducta para los administradores electorales es una regulación independiente que fue diseñada específicamente para procesos electorales.
Los códigos de ética y conducta que son promulgados en una legislación o regulación tienen carácter obligatorio e incluye la imposición de sanciones y multas para determinadas violaciones a la misma. La sanción puede abarcar desde una multa, la suspensión de labores e incluso hasta la descalificación como candidato. Por ejemplo, el incumplimiento a la Ley de Ética de Wyoming es sujeto de castigo sobre la base de una multa no mayor a los mil dólares americanos. La violación a las leyes sobre ética regularmente son causa suficiente para dar por terminada una relación laboral o para remover de su cargo a un funcionario público.85 Las violaciones a este código que involucran acciones penales son turnadas al sistema penal de justicia.
En la India, se presupone que los partidos políticos y candidatos contendientes se deben apegar a un Modelo de Código de Conducta. Este código fue dado a conocer por la Comisión Electoral después de que los partidos políticos llegaron a un consenso sobre su contenido. Este modelo impone una serie de lineamientos generales sobre la forma en que los partidos y candidatos se deben conducir durante la campaña.
Está orientado a mantener una campaña electoral sobre líneas sanas, evitando los conflictos y enfrentamientos. Entre los partidos políticos o sus seguidores y para asegurar que prevalezca la paz durante el periodo de campaña y a partir de entonces, hasta la declaración de los resultados. Este modelo también prescribe lineamientos de comportamiento para el partido en el poder, ya sea del centro o de un estado, para asegurar las mismas condiciones a todos los partidos y para que el partido gobernante no haga mal uso de su posición para beneficiarse en su campaña electoral.86
Para mayor información sobre códigos de conducta de los partidos políticos, ver Códigos de conducta para los partidos políticos, Observación Electoral Nacional (para observadores nacionales) y Estándares para Evaluar las Elecciones (para observadores internacionales).