Las personas LGBTI a menudo enfrentan numerosos obstáculos para ejercer
plenamente sus derechos de participación en el proceso electoral. En diferentes
países, las organizaciones de observación electoral, tanto nacionales como
internacionales, se han esforzado por identificar las barreras a la
participación efectiva de esta comunidad, documentar la legislación y las
prácticas discriminatorias, y formular recomendaciones para fomentar su
inclusión política. Además, las personas LGBTI también pueden participar en el
proceso electoral como observadores electorales.
Ejemplo: Las misiones de observación electoral de la Unión Europea
ocasionalmente abordan la participación de personas LGBTI en las elecciones, incluyendo
referencias a este tema en sus declaraciones preliminares e informes finales.
En Honduras, el informe final de la Misión de 2017 dio cuenta de la
discriminación y la violencia contra los miembros de la comunidad LGBT y de la
existencia de candidaturas LGBT en las elecciones internas y al PARLACEN.
También señaló el caso de una candidata trans que no tuvo la oportunidad de
cambiar su nombre en la papeleta de voto para que este correspondiera a su
identidad de género real.[1]
El informe final de la Misión 2018 en El Salvador abordó las candidaturas LGBT,
la violencia contra la comunidad LGBT y los esfuerzos del OGE para promover el
voto de las personas transgénero. [2]
Ejemplo: En México, el Instituto Nacional Electoral estableció un protocolo
para mejorar la participación de los votantes transgénero en las elecciones de
2018.[3]
Las organizaciones de la sociedad civil Organización Fuerza Ciudadana AC y
Espacio Progresista desplegaron observadores nacionales en los centros de
votación durante la jornada electoral, para monitorear y evaluar la
implementación del Protocolo Trans. La comunidad transgénero también tuvo la oportunidad
de participar en estos esfuerzos de observación de elecciones, al convertirse
en observadores nacionales. Organización Fuerza Ciudadana AC se beneficia del
Fondo de Apoyo para la Observación Electoral, una iniciativa lanzada por el
PNUD y los OGE de México para mejorar la transparencia de la observación electoral
nacional.[4]
Ejemplo: En la segunda ronda de las elecciones presidenciales guatemaltecas de
2015, Acción Ciudadana y la Red Multicultural de Mujeres Trans desplegaron
observadores electorales en la Ciudad de Guatemala y otros municipios vecinos,
para identificar los obstáculos que restringen la participación de las mujeres
transgénero en el proceso de votación. Su informe contiene recomendaciones
concretas para promover la participación electoral efectiva de esta comunidad. [5]
Ejemplo: En Pakistán, la Red de Elecciones Libres y Justas (FAFEN) reclutó a
25 personas transgénero como observadores electorales para las elecciones
generales paquistaníes de 2018, para monitorear las violaciones de los derechos
humanos, la violencia y la discriminación contra los grupos sociales marginalizados
en el proceso electoral. [6]
[1] Misión de Observación Electoral de la Unión Europea en Honduras
(2017): “Informe final, elecciones generals de 2017”.
[2] Misión de Observación Electoral de la Unión Europea en El Salvador
(2018): “Informe final”.