La incidencia es una forma de participación en los asuntos públicos y
tiene el potencial de ayudar a individuos y organizaciones a promover y
proteger los derechos humanos. En muchos países, las asociaciones de mujeres
han desempeñado un papel importante en el fomento de la igualdad de género y la
participación de las mujeres en la política y las elecciones. A través de
campañas de incidencia, los grupos nacionales e internacionales de mujeres han
logrado convencer a los actores relevantes sobre la importancia primordial de
garantizar la igualdad de oportunidades y derechos para hombres y mujeres,
contribuyendo a un cambio social positivo. A través del monitoreo, la
documentación y las estrategias de comunicación efectivas, los defensores de la
igualdad de género pueden fomentar la inclusión en diferentes etapas del
proceso electoral.
Las estrategias de incidencia utilizadas por los grupos de mujeres a
lo largo del proceso electoral pueden dirigirse a diversos actores y buscar
una amplia variedad de objetivos, incluidos un mayor equilibrio de género entre
los candidatos, en los puestos de toma de decisiones en el seno de los partidos
políticos, entre los observadores, en la administración electoral y otros
actores; influenciar agendas políticas y el debate público; apoyar la reforma
legal y la revisión de los procedimientos electorales; promover una cobertura
mediática sensible al género en el proceso electoral; y fortalecer el
componente de género en la observación de elecciones, entre muchos otros.
Ejemplo: En Madagascar, el Consejo Nacional de Mujeres llevó a cabo una
campaña de cabildeo durante el proceso electoral de 2013, dirigida a los
líderes de los partidos políticos. Esta iniciativa incluyó reuniones con
líderes de partidos políticos para alentar una mayor representación de mujeres
en las listas de candidatos, así como para involucrar al partido en posiciones
políticas progresistas que favoreciesen los derechos de las mujeres. Además de
estos esfuerzos de incidencia, el Consejo Nacional de Mujeres, la Comisión
Electoral Nacional Independiente para la Transición (CENI-T) y el PNUD
organizaron un diálogo interpartidario de alto nivel con candidatos
presidenciales que abordaron las políticas de igualdad de género. [1]
Ejemplo: En Haití, IDEA Internacional y el Ministerio de la Mujer organizaron
un foro en 2017 que permitió a los “partidos políticos y organizaciones de
mujeres reunirse, relacionarse, y compartir experiencias y lecciones aprendidas
para promover con éxito la participación y representación política de las
mujeres”. [2]
Ejemplo: En Malí, como resultado de los esfuerzos de incidencia de las
asociaciones de mujeres y otras organizaciones de la sociedad civil, en 2015 se
aprobó un proyecto de ley de cuotas de género, que exige que al menos el 30 por
ciento de las autoridades electas o designadas sean mujeres. En este trabajo de
incidencia, las organizaciones de la sociedad civil unieron fuerzas con
legisladoras de la Red de Mujeres Parlamentarias y el Ministerio para la
Promoción de las Mujeres, los Niños y la Familia. Los aliados masculinos,
especialmente los parlamentarios, también desempeñaron un papel clave en la
adopción de la ley. [3]
Ejemplo: En Paraguay, una coalición multisectorial con diversos partidos
políticos y organizaciones de la sociedad civil lanzó un debate nacional sobre
la baja representación de las mujeres en política, organizando una serie de
formaciones y foros de 2014 a 2018 para sensibilizar a las mujeres y abogar por
la adopción de una ley de paridad democrática. Esta iniciativa, apoyada por ONU
Mujeres, el PNUD y el Ministerio de la Mujer, alcanzó 14 de los 17
departamentos del país. Las organizaciones de la sociedad civil que
participaron de estos esfuerzos incluyeron el Centro de Documentación y
Estudios (CDE), DECIDAMOS Campaña por la Expresión Ciudadana, la Red de Mujeres
Munícipes del Paraguay y la Red de Mujeres del Sur, entre otras.[4]
Ejemplo: IFES ha apoyado los esfuerzos de incidencia de las mujeres con
discapacidad en varios países. En Nepal, en 2018, IFES y la Asociación Nacional
de Mujeres con Discapacidad ofrecieron capacitación sobre incidencia para
mujeres con discapacidad, que abordó cómo desarrollar un programa político
unificado y la práctica de habilidades de incidencia para comunicarse con el
gobierno.[5]
En Kenia, IFES se asoció con Women
Challenged to Challenge, una organización para personas con discapacidad, con
el objetivo de desarrollar una agenda de políticas públicas que ayudaría a las
mujeres con discapacidad en sus esfuerzos de incidencia. [6]
Ejemplo: En Myanmar, IFES lanzó en 2017 la campaña “Nos unimos”, en colaboración
con la organización nacional Yaung Chi Thit (YCT), para alentar la
participación política de las mujeres. Los integrantes de esta campaña se
acercaron a las autoridades electas para conversar sobre la importancia de la
participación política de las mujeres, movilizaron a sus comunidades y
recolectaron solicitudes fotográficas para demostrar su apoyo en mesas redondas
a nivel regional. [7]
Ejemplo: En Honduras, los líderes de los partidos y los aspirantes a
candidatos presidenciales de siete partidos se reunieron en octubre de 2016
para ratificar el “Pacto de paridad y alternancia política”, mediante el cual
los partidos se comprometieron a colocar a las mujeres en los primeros puestos
de las listas de candidatos, asegurando la aplicación de la paridad entre sus
candidatos y mecanismos efectivos de alternancia. Este acuerdo fue el resultado
de la campaña de incidencia "La peregrinación de la trenza" lanzada
por la Red de Mujeres Interpartidarias de Honduras, en asociación con NDI. [8]
[8] IKnowPolitics (2017): “Honduran Political Party Leaders Send Unified
Message for Women’s Political Participation”.