Con frecuencia, a los OGE se les confían actividades de sensibilización
para explicar el proceso electoral al electorado desde una perspectiva
imparcial, que incluye la educación cívica, la educación electoral y las campañas
de información electoral. Su función no es defender las políticas o programas de
los diversos partidos políticos y candidatos independientes, sino educar a la
población sobre cómo empadronarse, cómo emitir un voto correctamente y por qué
es importante participar en el proceso democrático, entre otras cuestiones.[1]
- La información electoral proporciona información básica que permite a
los ciudadanos calificados votar, abordando la fecha, hora y lugar de votación,
el tipo de elección, los documentos de identificación necesarios para votar,
los requisitos de inscripción en el padrón electoral y cómo votar.
- La educación electoral generalmente aborda la motivación y la
preparación de los votantes para participar plenamente en las elecciones. Se
trata de conceptos complejos, como el vínculo entre el proceso de votación y
los derechos humanos; el papel, las responsabilidades y los derechos de los
votantes; el carácter secreto del vote; la relación entre elecciones y democracia;
por qué cada voto es importante y cómo los votos se traducen en escaños.[2]
- La educación cívica se ocupa de conceptos más amplios que sustentan
una sociedad democrática, como los respectivos roles y responsabilidades de los
ciudadanos, el gobierno, los intereses políticos, los medios de comunicación y
los sectores empresariales y sin fines de lucro, así como la importancia de
elecciones competitivas. Lo ideal es que se realice de manera continua o a
largo plazo. [3]
El siguiente recurso gráfico muestra el diverso alcance y la
interrelación de la educación cívica, la educación electoral y la información electoral,
como estrategias de divulgación para dirigirse a los ciudadanos y los votantes.
A través de estas estrategias de sensibilización, los OGE, otras entidades
públicas y grupos de la sociedad civil pueden promover la igualdad de género y
la participación de las mujeres en el proceso electoral.

Es probable que las organizaciones de la sociedad civil, los partidos
políticos y los medios de comunicación desempeñen un papel importante en la organización
de todo tipo de actividades de sensibilización de los votantes. En la encuesta
de los OGE de 2012 del PNUD y ONU Mujeres, el 77 por ciento de los encuestados
dijo que había realizado campañas de sensibilización junto con organizaciones
de la sociedad civil.[4]
Las campañas de educación cívica y electoral y de información de los
votantes puede dirigirse al electorado en general o adaptarse a grupos
particulares. Cuando el programa de divulgación se dirige a la población
general, es importante que las consideraciones de igualdad de género se incorporen
en los mensajes y la presentación de los mismos. Los materiales de divulgación
deben mostrar a las mujeres de todas las edades participando en cada función,
como personal de empadronamiento y miembros de mesas de votación, como
observadoras y fuerzas de seguridad, como personas que solicitan su inscripción
en el padrón electoral y como votantes. En la encuesta de los OGE, solo la
mitad de los organismos encuestados dijo que había incorporado el género en las
estrategias de información de los votantes.[5]
Si bien los programas de sensibilización generalmente se dirigen al
conjunto del electorado, en muchos países se están diseñando e implementando
programas específicos para llegar a grupos particulares como mujeres, jóvenes e
indígenas. En la encuesta de los OGE, el 54 por ciento de los encuestados dijo
que había brindado educación electoral específicamente dirigida a las mujeres.
Con respecto a la igualdad de género, hay dos mensajes muy importantes que
deben comunicarse: primero, que las mujeres tienen derecho a votar y
presentarse a las elecciones y que su participación a menudo debe ser alentada;
y segundo, que el voto es secreto, nadie más necesita saber cómo se ha emitido
el voto de un individuo. En la encuesta de los OGE, el 80 por ciento de los
encuestados dijo que había proporcionado educación sobre el secreto del voto y
la lucha contra el voto familiar. [6]
Los métodos de difusión son importantes en cuanto a la efectividad para
alcanzar a la audiencia destinataria, la facilidad con la que la audiencia
puede entender el mensaje y la medida en que ese método de difusión es tomado
en serio. La alfabetización es una consideración importante, como lo es el
acceso a los medios de comunicación. Las mujeres siguen siendo afectadas de
manera desproporcionada por el analfabetismo en muchas partes del mundo y en
algunas regiones las niñas enfrentan considerables dificultades para adquirir
habilidades básicas de lectura y escritura. El uso de una variedad de métodos
de difusión diferentes para el mismo mensaje tendrá un impacto mayor que el uso
de un solo método de difusión. Los métodos comunes de difusión para la
educación cívica y electoral pueden incluir sesiones presenciales; radio y
otros mensajes de audio; simulacros de elecciones o ensayos de la jornada
electoral; canciones, teatro y videos; centros de recursos; y tecnología de la
información y la comunicación. [7]
En muchos países, se proporciona educación cívica y electoral a los
estudiantes a través del currículo académico. Brindar educación e información electoral
en las escuelas es una forma de fomentar el compromiso cívico desde una edad
temprana y promover la igualdad de género. En la encuesta de EMB, el 63 por
ciento de los encuestados dijo que había proporcionado educación cívica en las
escuelas. [8]
Ejemplo: En Burundi, la campaña “Vote y sea elegida” capacitó a casi 260
mujeres para trabajar en todo el país y educar a otras mujeres sobre el empadronamiento
y la votación y para apoyar a las candidatas a desarrollar sus campañas. [9]
Ejemplo: En el Líbano, la campaña “Usa tu voz” en los medios de comunicación
nacional “tuvo como objetivo promover la participación de las mujeres en el
proceso electoral. La campaña incluyó a cinco mujeres libanesas prominentes que
aparecieron en anuncios de televisión, radio, transporte público y vallas
publicitarias”. La campaña fue organizada por el NDI y la Asociación Libanesa
para Elecciones Democráticas.[10]
Ejemplo: En Albania, la Comisión Electoral Central (CEC) ha tomado varias
medidas para evitar el voto familiar. Existe una necesidad continua,
particularmente en las áreas rurales, de aumentar la conciencia sobre los
derechos de las mujeres, la igualdad de género y los derechos políticos de las
mujeres. Las campañas de educación cívica y electoral son implementadas por la
CEC en los medios de comunicación (televisión y periódicos), diseñadas para
llegar específicamente a las mujeres votantes. [11] Además, el mensaje de que las mujeres tienen
derecho a votar por el candidato de su elección se transmitió mediante en
anuncios televisivos en tono humorístico desarrollados por la CEC y la Plataforma
Nacional para la Mujer. [12]
Ejemplo: En Tanzania, uno de los componentes del programa de educación electoral
del PNUD fue alentar a las mujeres a empadronarse, a través del uso de la
radio, anuncios en los periódicos y un folleto. El folleto “Las mujeres y las
elecciones de 2010” alentó a las mujeres a presentarse como candidatas y a
votar. El folleto recordó a las mujeres que tienen derecho a elegir el
candidato por el que quieren votar. También contenía detalles sobre mujeres
embarazadas, madres lactantes, mujeres con discapacidad y mujeres ancianas que
tienen preferencia y apoyo de los administradores electorales durante la
jornada electoral. Los mensajes que alentaban a las mujeres a votar se repitieron
en la televisión, la radio, el periódico y en carteles.[13]
Ejemplo: En Costa Rica, se organizan actividades de capacitación en escuelas,
colegios y universidades. La educación cívica aborda no solo el ejercicio de la
votación, sino también los valores democráticos, la ciudadanía activa y la
participación.
Ejemplo: En Georgia, se crearon dieciséis centros regionales de recursos para
apoyar la participación del público en el proceso electoral, elevar los niveles
de educación de los votantes y mejorar los vínculos entre la administración
electoral y los otros actores en las regiones. Los ciudadanos tienen la
oportunidad de conocer y utilizar las instalaciones para la capacitación, la creación
de redes, los debates y otras iniciativas relevantes. Los principales públicos objetivos
son las mujeres y la generación joven de minorías nacionales que residen en el
país. Algunos de los centros se establecieron en zonas geográficas específicas
con una cantidad importante de poblaciones de minorías étnicas. [14]
Ejemplo: En Sudáfrica, se creó una película sobre las mujeres en las áreas
rurales, los problemas que enfrentan y cómo organizar la educación de los
votantes en esas áreas. La película se difundió ampliamente y se mostró en
unidades de video móviles en áreas que no tenían acceso a televisión. [15]
Para obtener más información sobre este tema, consulte el contenido
relacionado del proyecto ACE, que incluye:
En varios países, los OGE y las organizaciones de la sociedad civil
han lanzado campañas de educación cívica y electoral para educar a los votantes
y al público en general sobre la importancia de los derechos de las personas
LGBTI y para motivar la participación de esta comunidad en el proceso
electoral. En algunos casos, las campañas de educación cívica y electoral tuvieron
como objetivo brindar a los ciudadanos información sobre las posiciones de los
candidatos sobre los derechos LGBTI, responsabilizar a los candidatos ante sus
electores y ayudar a los votantes a tomar una decisión informada. Algunas
campañas de educación cívica y electoral están dirigidas específicamente a
personas LGBTI, con el propósito de motivar su participación como votantes. En
el caso de campañas especialmente dirigidas a personas transgénero y no
conformes al género, los mensajes clave a menudo tratan sobre los requisitos y los
procedimientos de identificación, con el objetivo de facilitar el proceso de
identificación en los centros de votación.
Ejemplo: En Guatemala, el Departamento de Inclusión Social del TSE desarrolló
una campaña de educación electoral para promover el voto de las personas LGBTI
en el referéndum de 2018 sobre la disputa territorial y marítima con Belice,
para la cual se imprimieron 10.000 carteles. Además, desde 2016, el
Departamento de Inclusión Social ha organizado talleres de sensibilización y
capacitación en las escuelas, que abordan cuestiones de derechos humanos,
específicamente la importancia de garantizar la participación política y cívica
de todas las personas, independientemente de su identidad de género y
orientación sexual. Desde 2018, el Departamento de Inclusión Social del TSE ha
estado implementando el Programa de Formación para Formadores
Cívico-Electorales, que se ofrece a los docentes en las escuelas y se basa en
un enfoque de género e inclusión, abordando las cuestiones relativas a los
derechos de las mujeres, de las personas LGBTI y otros grupos subrepresentados.
Además de estas actividades de educación cívica y electoral, el Departamento de
Inclusión Social del TSE contribuyó a la creación de la Red de Jóvenes por la
Inclusión y la Democracia, que ha brindado capacitación y desarrollo de
capacidades a los miembros de la comunidad LGBTI en al menos ocho departamentos
regionales. Estas formaciones abarcan una amplia variedad de temas, como el
compromiso cívico, los derechos humanos, el empadronamiento de votantes, la incidencia
y el marco legal, entre otros. [16]
Ejemplo: En el Líbano, donde se criminalizan las relaciones entre personas del
mismo sexo, la Fundación Árabe para las Libertades y la Igualdad lanzó una
campaña de educación electoral para las elecciones generales de 2018, con el
objetivo de informar a los votantes sobre las posturas de los candidatos hacia
los derechos humanos de las personas LGBTI. Esta campaña incluyó una serie de
videos que se publicaron en las redes sociales y un sitio web que describe las
posiciones de los candidatos sobre los derechos LGBTI. [17]
Por primera vez, este tema fue parte del
debate público del país, con numerosos candidatos que pidieron públicamente la
despenalización de la homosexualidad. [18]
Ejemplo: En el marco de las elecciones legislativas y presidenciales colombianas
de 2018, las asociaciones LGBTI lanzaron la campaña de educación electoral “Voto
por la Igualdad 2018”, con dos objetivos principales: a) informar a los
votantes sobre las propuestas de los candidatos sobre igualdad y no
discriminación; y b) dar visibilidad a los candidatos abiertamente LGBTI. Los
grupos de la sociedad civil que lanzaron esta iniciativa incluyeron Caribe
Afirmativo, Colombia Diversa, Fundación Santamaría, EgoCity y Sinsentido.
Recibieron apoyo del Friedrich Ebert Stiftung, el LGBTQ Victory Institute, el
National Democratic Institute, el Netherlands Institute for Multi-Party
Democracy y el Observatorio para la Participación Política de las personas
LGBTI en Colombia. [19]
Ejemplo: En Serbia, las organizaciones nacionales de la sociedad civil Queeria
e Izadji desarrollaron un proyecto de educación electoral en 2012, con el apoyo
del NDI, con el objetivo de monitorear las declaraciones de los candidatos y
los partidos políticos sobre temas LGBTI e informar a los ciudadanos sobre sus
posiciones en relación a este asunto. Los socios del proyecto lanzaron el sitio
web Voto Rosa (Roze Listici), brindaron información sobre las posturas de los
candidatos y realizaron una encuesta en línea dentro de la comunidad LGBTI
sobre prioridades políticas. [20]
Ejemplo: En Canadá, la organización juvenil Speqtrum Hamilton lanzó la campaña
de educación electoral #ONTransVoters en las redes sociales, con el objetivo de
promover la participación de los votantes transgénero en las elecciones de 2018
en Ontario. Sus mensajes se enfocaron principalmente en la identificación
requerida para los votantes transgénero, las posibilidades de voto postal, los
procedimientos de empadronamiento de votantes y la motivación para votar. [21]
Ejemplo: En los Estados Unidos de América, el Centro Nacional para la Igualdad
Transgénero lanzó la campaña de educación electoral "Votar siendo trans"
en 2012, que proporcionó información a los votantes transgénero sobre los
procedimientos de empadronamiento, los requisitos de identificación y los procedimientos
de voto por correo, así como sobre los mecanismos de denuncia en caso de que no
se les permitiera votar, como contactar a abogados voluntarios en los centros
de votación o llamar a una línea telefónica especial. En el marco de esta campaña,
el Centro subió videos en las redes sociales con historias personales de
ciudadanos transgénero y desarrolló una lista de verificación para los votantes
que representan a esta comunidad. Según esta organización, las nuevas leyes de
identificación podrían haber restringido la participación de personas
transgénero en gran medida, impidiéndoles votar. Por esta razón, la campaña
también generó conciencia sobre la importancia de asegurarse de que el nombre y
la dirección en la identificación coincidan con los datos en el padrón
electoral. [22]
Ejemplo: En Guatemala, antes de las elecciones de 2015, IFES apoyó al TSE en
la realización de una campaña de educación electoral en televisión, radio e
internet para promover el empadronamiento de mujeres, personas LGBTI y jóvenes
votantes. Esta campaña también incluyó una estrategia conocida como "No a
la manipulación del voto", que buscaba sensibilizar a las mujeres y
personas LGBTI a través de las artes escénicas sobre la importancia de ejercer
su derecho al voto sin presión ni coacción.[23]
Ejemplo: En Haití, IFES trabajó en colaboración con la organización LGBTI
KOURAJ de 2016 a 2017, para promover el compromiso cívico de las personas LGBTI
y su participación en el proceso electoral. Se organizaron varios talleres de
sensibilización para los miembros de esta comunidad. Más de 400 personas LGBTI
participaron en estas sesiones para motivar al voto. Además, esta iniciativa
incluyó el desarrollo de un cartel para promover la participación de las
personas LGBTI en el período electoral. Como se muestra a continuación, el
póster muestra a dos parejas del mismo sexo que se dirigen a una mesa de
votación y contiene el siguiente mensaje: “Gays y lesbianas, somos hombres y
mujeres haitianos, votemos para cumplir con nuestro deber cívico”.

[1] PNUD y ONU Mujeres (2016): op. cit. p. 93.
[2] PNUD y ONU Mujeres (2016): op. cit. p. 93.
[3] PNUD y ONU Mujeres (2016): op. cit. p. 93.
[4] PNUD y ONU Mujeres (2016): op. cit. p. 94-95.
[5] PNUD y ONU Mujeres (2016): op. cit. p. 96.
[6] PNUD y ONU Mujeres (2016): op. cit. p. 97.
[7] PNUD y ONU Mujeres (2016): op. cit. p. 100.
[8] PNUD y ONU Mujeres (2016): op. cit. p. 99.
[9] PNUD y ONU Mujeres (2016): op. cit. p. 95.
[10] PNUD y ONU Mujeres (2016): op. cit., p. 95.
[11] Lefterije
Luzi, Presidente de la Comisión Central de Elecciones de Albania, 2014.
[12] PNUD y ONU Mujeres (2016): op. cit. p. 97.
[13] PNUD y ONU Mujeres (2016): op. cit. p. 98.
[14] PNUD y ONU Mujeres (2016): op. cit. p. 102.
[15] PNUD y ONU Mujeres (2016): op. cit. p. 101.
[16] Información
proporcionada por el TSE de Guatemala en febrero de 2019.
[23] IFES: “Guatemala: Acciones de IFES para promover el voto de la mujer
y la población LGBTI”.