Existen varias formas a través de las cuales la instancia reguladora puede
abordar el problema del discurso de odio.
Previa
aprobación de materiales de difusión directa.
El órgano regulador puede pedir que
todos los materiales de difusión sean remitidos con anticipación para asegurar
que los discursos políticos cumplen con ciertos parámetros de carácter legal o
voluntario. Para que se lleva a cabo el enfoque anterior, el país de de contar
con un antecedente histórico sobre discursos difamatorios o un serio problema
político. La desventaja en principio se refiere a que tal aproximación puede
ser vista como una interferencia en el discurso político y punto central de la
censura previa. La dificultad en la práctica es que impone una carga
administrativa adicional en el órgano regulador
Códigos de
Conducta
No obstante, ninguna posibilidad se presenta en relación a la cobertura de
noticias: la legislación internacional rechaza totalmente la "restricción
anticipada" o la censura en la pre-publicación. El problema de los
discursos difamatorios tendrá, por tanto, que ser dirigido primeramente a la
fuente -esto es, con los propios partidos políticos y candidatos. Esto se podría lograr plenamente si, antes
del periodo de campaña electoral, los partidos políticos acuerden un código de
conducta. Algunas ocasiones, como en Sudáfrica y en Camboya, este código de conducta
funcionará como una ley.
Quejas
El problema de los informes poco profesionales o tendenciosos sobre las
declaraciones de los actores políticos tendrá que abordarse, primeramente, por
la instancia reguladora, a través de los mecanismos establecidos para la
recepción de quejas -ya sea un regulador de los medios de comunicación o una
autoridad electoral. El remedio más efectivo será el de permitir la corrección
de los materiales difamatorios a través del derecho de réplica Existen algunos ejemplos de este tema en
Bosnia y el Reino Unido.
Promoción
de los Parámetros Profesionales
La medida más significativa que la instancia reguladora puede llevar a cabo
para promover un equilibrio en los informes con declaraciones difamatorias es
asegurar la adhesión de los medios de comunicación a estándares de
profesionalización. Para llevar a cabo esto, será de vital importancia la
colaboración con los periodistas independientes y los acuerdos con organismos
de unión mediática. El órgano regulador puede comprometerse en la capacitación
de periodistas para la elaboración de informes de las campañas políticas y de
las elecciones en general.