En general, nunca parece haber suficiente dinero para la educación
al votante. Se debe hacer una profunda consideración de los recursos de los que
un país dispone en términos de su infraestructura. Para ello se suele incluir la
forma como estos recursos pueden contribuir, o impedir de no estar disponibles,
el desarrollo del programa.
Hay cuatro áreas específicas que los educadores electorales
deberán considerar acerca del país donde están trabajando:
El sistema educativo: Para entender el sistema educativo se debe tener
información básica sobre el número y ubicación de las instalaciones de enseñanza
primaria, secundaria y universitaria, con el fin de identificar posibles sitios
y grupos de trabajo. Un análisis de plan nacional de estudios identificará la existencia
de materiales y competencias educativas que puedan servir como fundamento del programa.
Medios masivos de comunicación: Un estudio de los medios masivos de comunicación arrojará
un análisis de los medios existentes, el mercado que abarcan, las
características de sus audiencias, la naturaleza de su capital, por ejemplo,
los que son del Estado probablemente tengan la obligación por ley de asignar
cierto tiempo aire para los mensajes de educación electoral, mientras que puede
o no ser necesario pagar a los de tipo privado. El suministro de energía
también debe ser considerado como elemento que influye en la selección de los
propios medios.
Mecanismos
de entrega y distribución: ¿Cómo se difundirán los mensajes del programa de educación
al votante? Esto usualmente contemplará la distribución de materiales educativos,
el despliegue de instructores, y la aplicación de controles financieros y administrativos.
¿Qué tan confiables son todos esos medios? ¿Cuál es la calidad de la
infraestructura del transporte y qué opciones ofrece? ¿Debe haber una distribución
ad hoc? ¿Existen empresas u ONGs que
pudiera asumir exitosamente las responsabilidades de distribución? ¿Existen
grupos específicos que pudieran ayudar con la distribución de ciertos
materiales?
Espacio público: Puesto que la educación electoral comprende la diseminación
de información a través de los medios de comunicación y la reunión de personas para
participar en dinámicas de grupo, los educadores electorales tendrán evaluar qué
instalaciones públicas están disponibles para que las personas se reúnan, qué tipo
de lugares se adaptan mejor a los tipos de técnicas empleadas (como los juegos de
rol), y las condiciones bajo las cuales las personas tienen la costumbre de reunirse.
Disposiciones especiales también pueden ser necesarias para reservar el espacio
o para notificar a los funcionarios locales de su uso para educación electoral.
También puede ser necesario proporcionar alojamiento para los formadores o para
los participantes en los programas de capacitación.
Ventajas
adicionales
El conocimiento de la infraestructura del país o la región
puede ayudar a identificar el rango de posibles escenarios para la educación al
votante, introducir individuos y organizaciones al programa, establecer diferenciaciones
regionales y culturales las cuales deberán ser tenidas en cuenta; igualmente posibilitará
el establecimiento de áreas marginales o de alto riesgo donde se requiera un mayor
esfuerzo.
La documentación de esta información será muy útil para el
personal encargado de la planeación. De igual manera, dada su utilidad, ésta debe
ser corta, analítica y fácil de comunicar. Mucha de esta información debe estar
disponible fácilmente. Si no lo está, se tendrá que sopesar el costo de obtener
esta información contra los beneficios de tenerla. En algunos casos, resúmenes ilustrativos
o intuitivos pueden ser más beneficiosos para la planificación de los programas
de educación electoral.
¿Cómo se encuentra la información?
Es posible que ciertas oficinas gubernamentales necesiten
regularmente información sobre el país. Pueden ser los responsables del desarrollo,
la planificación o las comunicaciones. Además de reunir esta información, es
posible que también sean responsables de su distribución. Es factible que compañías
a nivel nacional tales como bancos, compañías mineras y grandes manufactureras también
mantengan información.
Algunos países, así como ONGs y otras organizaciones publican
libros u otros reportes anuales.
Otros usos para la información de un país
Una autoridad electoral puede recolectar la información del
país para utilizarla con una amplia variedad de propósitos. Si este es el caso,
la tarea del educador electoral se facilita. Los intereses de los planificadores
y administradores en la autoridad electoral serán diferentes, y los educadores electorales
no podrán renunciar a la responsabilidad de preparar un resumen adecuado para su
propio programa.
Dicho resumen deberá ser distribuido entre las agencias encargadas
de partes del programa de educación electoral, entre las ONGs motivadas a desarrollar
programas por sí mismas, y después de algunas modificaciones entre agencias internacionales
de educación y grupos de observadores.