Es
complicado establecer una distinción completamente clara entre los medios de
comunicación electrónicos, descritos en general en esta área temática, y los
medios electrónicos que han surgido como resultado de las nuevas tecnologías, y
que son el objeto de discusión en estas líneas. Por ejemplo, la Internet ha revolucionado
la forma en que las personas acceden desde su computadora a una variedad de
productos digitales.
La
nueva tecnología y el creciente impacto de las redes sociales y de
profesionales especializados hace posible que los individuos registren sus intereses
y que la información asociada a ellos les sea enviada. La Internet ha modificado
la manera en que se llevan a cabo muchas cosas.
El
hecho de que las computadoras están mucho más accesibles, tanto en los hogares,
como en los espacios públicos y comunales, hace que los individuos tengan
acceso directo a materiales (documentos, fotografías, videos, podcasts, y otros) disponibles en la
Internet y permite dar respuesta a mensajes publicados en la red.
En
lo que a educación electoral se refiere, incluso en países en desarrollo
(aquellos que generalmente tienen escasos recursos también tienen menos acceso
a las redes de computadoras, y donde se apoyan en conexiones telefónicas) donde
no hay un acceso generalizado —individual o de grupo— a Internet, existen
oportunidades para mensajes y programas especializados. Curiosamente, la Web es el único medio que
trasciende al ámbito local. Una vez en ella, se puede acceder incluso a un
recurso local, como uno creado para electores semi-analfabetos en un estado
dentro de Estados Unidos de América, por un usuario de una biblioteca en
Sudáfrica.
Esta
vorágine de la Internet, que evoluciona día con día, hace difícil el predecir
su impacto en los patrones de aprendizaje y en la estrategia educativa. Los
programas de educación cívica y electoral han innovado en el uso de la Web,
pero se puede hacer mucho más.
Por
desgracia, sigue siendo cierto que, como ocurre con todas las nuevas
tecnologías, las innovaciones suelen estar impulsadas por el entusiasmo más que
por una evaluación profesional de los productos, resultados e impacto. Los
costos iniciales de desarrollar un sitio web eficaz pueden ser altos. Este
costo puede ser recuperado mediante la venta de espacios para publicidad,
aunque eso sólo podría ser justificado al generar tráfico suficiente (y atraer
a la audiencia adecuada). Inicialmente, será mejor utilizar las herramientas que
permitan, esencialmente, la distribución de materiales a los educadores y
electores oficiales.
Gastar
dinero para que un estudiante en California aprenda cómo votar en Bosnia puede
no ser un uso efectivo de recursos, sin embargo, los países con un alto número
de electores expatriados pueden encontrar que una página web bien diseñada les
es muy útil.
Esta
sección se ocupa de la publicación en la
Web y de las ventajas y oportunidades disponibles producto de
los avances en la producción digital.