Periodo de actividad
Es posible que los grupos de observación y ONG's nacionales estén en actividad durante periodos sustanciales de tiempo antes y después del proceso electoral. Sus actividades no siempre pueden verse favorecidas por el gobierno en funciones.
Consulta de rutina
La consulta de rutina se entiende más como el intercambio de información acerca del proceso electoral que sobre temas fundamentales requerirían cambios a la ley o regulaciones electorales.
Resulta fácil para aquellos que se encuentran fuera del proceso de administración sugerir modificaciones a los procedimientos que desde su punto de vista se traducirían en mejoras y manifestarse cuando sus sugerencias no son atendidas debido a constreñimientos de carácter legislativo. Hay muchos temas relativos a la conducción de las elecciones parlamentarias y locales en el Reino Unido que requieren reformas legislativas para hacer más accesible el procedimiento de votación - los ONG's y grupos con intereses especiales han hecho propuestas al respecto de manera reiterada, pero hasta ahora ningún gobierno les ha conferido la prioridad suficiente como para actuar en consecuencia, aunque hay un amplio consenso sobre la necesidad de introducir cambios.
Al manejar una relación con cualquier organización involucrada directa o indirectamente con el proceso electoral, algunos de los puntos fundamentales para el administrador electoral son:
- Tratar con todos los contactos de una manera estrictamente imparcial y objetiva
- Asegurar que la información se proporcione sobre bases de estricta igualdad
- Establecer líneas de comunicación eficientes con las organizaciones a efecto de hacer más eficaz el uso de los recursos humanos en ambos lados
- Acordar protocolos para que los problemas más comunes no se presenten continuamente o ante otros oficiales electorales -si se ha llegado al punto en que subsisten posiciones diferentes sobre un tema en particular y después de una consideración plena ninguna de las partes está dispuesta a modificar su postura, entonces debe abandonarse el tema -no tiene sentido continuar con una argumentación infructuosa.
Modificaciones a la Ley
Puede suceder que el administrador electoral reaccione a comentarios vertidos por algunas organizaciones y busque introducir oportunamente cambios a la ley electoral para que resulten aplicables a un proceso electoral en particular. Sin embargo, en muchos casos esto no será posible y durante las consultas de rutina necesita dejar muy en claro, qué asuntos están dentro de la competencia del administrador, cuáles pueden ser llevados a cabo y cuáles requieren cambios legislativos - el organismo puede fijar su posición acerca de las reformas legislativas una vez concluido el proceso electoral y el separar este asunto de cualquier otro será interés de todos los implicados.
Reacciones a perspectivas distintas
Es importante mantener relaciones profesionales - la diferencia de opiniones o perspectivas sobre un aspecto específico del proceso electoral no es razón suficiente para que una relación de trabajo plagada de recriminaciones. Si el administrador electoral está actuando conforme a la ley y no ve ninguna razón suficiente para apoyar sugerencias de modificaciones que se le lleguen a presentar, debe explicar su posición claramente al o los organismos interesados. Debe fijarse claramente la posición legal, haciendo referencia a las disposiciones legales aplicables y a la interpretación de los administradores electorales sobre el particular, agregando, de ser el caso, las razones de por qué el administrador no apoya o está de acuerdo con los comentarios planteados.
Algunas ideas que lleguen a presentase pueden ser muy buenas, en cuyo caso deben ser evaluadas y, de ser posible, instrumentadas, otorgando el crédito debido a la organización que la presentó.
Relaciones entre organizaciones
No resulta extraño que diferentes organizaciones sostengan fuertes creencias o convicciones acerca del proceso electoral y que en ocasiones resulten incompatibles. Es por ello que el administrador electoral debe ser profesional y apartidista en su relación con los distintos organismos. Cualquier comportamiento con indicios de conducta parcial hacia o en contra de un organismo en particular minará la confianza. Celebrar reuniones o sesiones informativas conjuntas es una manera de asegurar que todos los organismos cuenten simultáneamente con la misma información y para que puedan observar que no necesariamente todos comparten los mismos puntos de vista. También brindan la oportunidad de informar a todas los organizaciones sobre los distintos asuntos planteados al administrador electoral y para que este tenga información directa sobre cuáles sugerencias o quejas tienen un apoyo amplio y cuáles representan una opinión minoritaria.
Los vínculos con una gran variedad de organizaciones pueden consumir una considerable cantidad de tiempo -la administración de un proceso electoral siempre debe ser la principal prioridad. Destinar personal no operativo para manejar los vínculos y relaciones puede evitar al personal clave las tensiones de tener que lidiar con grupos externos que puede creer que no valoran plenamente la sustancial carga de trabajo implicada en la organización del proceso electoral.
Revisión
Asegurarse que todas los organizaciones sepan que habrá una revisión post-electoral del proceso y que todas tendrán la oportunidad de formular sus observaciones, puede ayudar a establecer una buena relación -incluso si un asunto específico tiene que ser puesto a un lado debido a las diferencias de opinión, la oportunidad de volver a él a la luz de la experiencia reportada por el proceso puede disipar cualquier molestia derivada de la falta de acuerdo.