Normalmente, es esencial comprender el contexto dentro del cual se conducirán los programas de educación al votante. Esta evaluación debe comprender un entendimiento de los votantes en sí, así como los recursos disponibles para promover el programa.
Entender el contexto contribuye a que los programas sean relevantes y significativos. Es igualmente importante asegurarse que los programas serán no solamente efectivos, sino diligentemente evaluados después de ser completados.
En relación con los votantes, los educadores desearán conocer sus antecedentes para después, haciendo uso de las mejores técnicas disponibles, determinar las necesidades educativas u objetivos electorales de los grupos particulares.