No existe ningún tipo de mensaje estandarizado que deba ser incluido dentro del programa de información al votante. Todos deben resultar acordes con una elección en particular. Sin embargo, lo que sí existe es un conjunto de categorías que deben ser cubiertas.
Fecha y hora de las elecciones
La fecha y la hora en que se va a llevar a cabo la votación es una información estándar que debe aparecer en cualquier material publicado. A pesar de que pueden ser reglas generales en todo el país, puede que no sea así en países más grandes. Por ende, la información debe ser regionalizada.
Si bien la información puede iniciar teniendo un bajo perfil, es probable que a medida en que se aproxima la fecha de la elección vaya adquiriendo más importancia en las comunicaciones tanto por parte de las autoridades electorales como por parte de los candidatos. Para ejemplos de materiales con fechas específicas, ver posters - japan y calendar - sierra leone.
Fechas y horarios para el registro de los votantes
La información acerca de los horarios y fechas para el registro de los votantes es más compleja debido a las posibles variaciones entre regiones y jurisdicciones. Particularmente, puede existir la tentación de ofrecer toda la información con relación al registro a través de una sola fuente. Esto se debe evitar y los votantes deben recibir sólo la información que necesitan, en tanto que la información más detallada acerca de las inspecciones, quejas y revisiones de las listas debe aparecer por separado, en publicaciones más técnicas.
No se debe asumir con cualquier campaña de información, específicamente con la del registro de los votantes, que una sola notificación legal, tal como se requiere en muchas leyes, sea suficiente. La información debe estar disponible donde la gente se encuentre y debe hacerse accesible en formas que pueda entender y advertir.
Centro de Registro
Uno de los aspectos más complicados del proceso de registro del votante, a no ser que se haga por correo o a través de cualquier otro medio de comunicación, es encontrar el sitio donde realizar el trámite. A menos que las autoridades hayan decidido identificar unos centros establecidos que posteriormente pueden ser utilizados también como sitios de votación, es probable que el registro se lleve a cabo en una gran variedad de sedes. Como resultado, debe haber una señal pública que indique los sitios donde las personas pueden registrarse. Estas señales o insignias también le permiten a la gente saber cuando se esta llevando a cabo el proceso de registro. Adicionalmente, se deben utilizar otros medios de comunicación masiva. Quizá los medios de comunicación de mensajes menos efectivos dentro de esta categoría son el correo y el teléfono, puesto que es muy difícil comprobar si efectivamente el mensaje ha sido recibido por el votante. Los operativos de registro se diseñan precisamente para hacer frente al hecho que las personas se mudan de domicilio.
Centro de Votación
Por lo general, los sitios de votación se pueden identificar una vez que el votante los ha visto. Pero no tiene necesariamente que ser la mesa de votación que le corresponde al elector. Puede haber gran confusión en los lugares donde se instalen muchas mesas de votación y la más cercana no sea precisamente la indicada.
Esta información puede no ser tan importante en lugares donde las elecciones se han realizado regularmente en un mismo recinto o sede y donde el registro se ha efectuado en el mismo lugar donde la persona debe votar. Esta información es absolutamente necesaria cuando los sitios de votación se están definiendo aún después del período de registro. Sin embargo, esto no es fácil de comunicar dado que se requiere información diferente para cada grupo de votantes. Se utilizan distintos métodos para manejar esto, entre los cuales están:
En cada uno de estos casos, es esencial algún tipo de comunicación personal. Existen estrategias para manejar esto cuando no se ha solicitado la información y cuando si se ha hecho. .
Los programas generales de información al votante deben promocionarse durante la fase inicial del proceso, puesto que es necesario que la gente sepa desde el principio dónde debe votar.
Documentos requeridos
Una vez que la gente conoce el lugar donde le corresponde votar, debe llegar a los puestos de votación con los documentos necesarios para comprobar su identidad. Las distintas administraciones pueden requerir documentos diferentes, y la selección de documentos necesarios para comprobar la identidad en el registro pueden ser diferente a aquellos requeridos el día de las elecciones.
En ambos casos, debe haber una campaña de comunicación acordada con anterioridad para que los posibles votantes puedan poner todos sus papeles en orden. Aquellos países que requieren documentos de identidad nacionales, o que utilizan cédulas o carnets de votantes, deben dar tiempo para que la gente pueda obtener estos documentos. A pesar de que esto quizá no afecte a la mayoría, es muy posible que sí lo haga en el caso de los jóvenes que todavía no han obtenido estos documentos, de los inmigrantes y refugiados y de otros grupos marginales que pueden no tener todos los documentos en orden.
Candidatos
Las autoridades electorales deben de comunicar la lista de candidatos legítimamente postulados y registrados para participar en las elecciones. Quizá esa lista solo tenga que ser colgada en el tablero de noticias de la oficina de un magistrado o de funcionario electoral local. Pero también es probable que tenga que ser publicada más ampliamente a través de la prensa.
Algunas administraciones electorales editan una publicación que ofrece la información básica con relación a los partidos participantes, normalmente sometida por los mismos partidos, la cual puede servir para habituar a los votantes a las guerras informativas que pueden llevar a cabo los partidos. Este es un aspecto particularmente importante en cualquier elección que se lleve a cabo en países donde los conflictos sectarios o étnicos han conducido a la separación geográfica de partidos y zonas "no fly".
El nivel de participación del gobierno en una elección
Los votantes que no comprenden la lógica detrás de una elección y las consecuencias intencionales de sus resultados, están en gran desventaja. Es muy fácil que estén mal informados y, por tanto, muy difícil que tomen decisiones informadas. Por ello es indispensable incluir información apropiada sobre los cargos de gobierno en disputa, la forma en que se van a contar los votos y el sistema de gobierno que va a resultar, dentro de un programa de información al votante. Si bien un programa educativo puede ir más allá que el simple apoyo a los ciudadanos en el entendimiento de los sistemas electorales y de gobierno, el programa de información puede limitarse a ofrecer información generada por otras dependencias o departamentos gubernamentales.
Códigos de conducta
Finalmente, las elecciones son concursos por el poder. Por ende, muchas leyes electorales establecen códigos de conducta para los partidos políticos. O pueden listar posibles violaciones a ley y las sanciones aplicables. Los ciudadanos son los mejores custodios contra abusos de los candidatos, pero sólo si saben qué es lo que deben esperar de sus partidos. Una amplia difusión de los códigos de conducta ayuda a reducir el conflicto.
De igual forma, las elecciones son un servicio ofrecido por el Estado, o en nombre del Estado, a través de un órgano independiente. Los ciudadanos tienen derecho a saber qué tipo de servicio pueden esperar; y la publicación de este tipo de información también sirve de protección en contra de malos manejos administrativos y posibles fechorías o fraudes electorales.