¿Quién vive dónde?
"¿Quién vive dónde?" Puede ser la primera y principal pregunta que los educadores necesitarán formularse al desarrollar un programa universal, bien sea de alcance nacional, regional o local. De hecho, la palabra "demografía" está estrechamente relacionada con la palabra "democracia", y puede decirse que es la base de las discusiones sobre representación y gobernabilidad.
Información del censo
La pregunta quién vive dónde usualmente se responde a través de un censo nacional. Donde éstos son llevados a cabo con regularidad por organizaciones confiables en circunstancias donde no existen incentivos para impedirlo y donde no hay posibilidades de que se cometan errores administrativos a lo largo del conteo y procesamiento de los resultados, muy seguramente existirán datos veraces para los educadores.
Estos datos incluirán información acerca de grupos de edad, tales como cuántas personas hay en cada grupo, género y estrato socioeconómico, así como características familiares. Todo esto estará disponible de acuerdo al área demográfica, y estas áreas demográficas pueden incluir pequeñas áreas diseñadas para zonificación. Toda esta valiosa información podrá ser consultada en un software específico (GIS) el cual permite una planeación detallada basada en un mapa. O podrá consultarse en cuadros y gráficos, folletos o tablas.
La manera como estas cuentas pueden llevarse a cabo varía de acuerdo al tipo de sociedad y los recursos disponibles. En general, un censo es un conteo completo de cada grupo familiar, y por esta razón se realiza periódicamente, usualmente cada cinco o diez años. Un censo puede resultar costoso y requerir de una planeación considerable. Los países tratarán de asegurarse que un censo y una elección nacional no coincidan.
Estos son igualmente controvertidas. El resultado de un censo es usado para la planeación nacional y la demarcación de circunscripciones electorales (ver Datos Poblacionales). En muchos países, el número de personas en cada estado o región tiene una influencia directa sobre el número de personas que pueden ser elegidos en cada región o estado. Por esta razón, los resultados de un censo son escrutados cuidadosamente. Las preguntas que se formulan determinan la información que estará disponible para quienes planean y para los políticos, y puede afectar las percepciones nacionales del área, especialmente si se encuentra que un gran número de personas hablan una lengua particular o se describen a sí mismos de determinadas maneras.
Dadas estas controversias, existe un control considerable sobre los resultados del censo. Una forma de control es aplicando encuestas simuladas con el fin de poner a prueba la información; otra manera es mirando la información longitudinal como estudios de mortalidad y estimados de desplazamiento territorial de la población. Pero también dada esta controversia, pueden existir datos que deben ser contrastados con otra información. En países con límites mal demarcados o en donde han existido conflictos comunitarios, la gente puede no dejarse censar.
Mientras que un censo se realiza sobre una base universal, países con amplios asentamientos urbanos informales pueden considerar difícil la realización del mismo. En algunas situaciones, la fotografía aérea y las muestras de datos sobre el número de personas por vivienda, pueden ser utilizados para obtener mejores estimados.
Usar con Precaución los Datos del Censo
Los educadores desearán darle un tratamiento cauteloso a la información recogida en el censo; querrán igualmente usarla en compañía de otra información recogida durante el registro de votantes o con datos adicionales obtenidos por aquellos que trabajan en un área particular. A pesar de esta precaución, las autoridades electorales que no posean información acerca del censo estarán en desventaja. En el caso de un país nuevo o en regiones con límites gubernamentales, por ejemplo, o cuando un censo no ha sido realizado en muchos años, las autoridades electorales probablemente sub-planearán o sobre-planearán. La última opción, aunque es más costosa, es preferible.
Información Básica Necesaria
Los educadores desearán tener la capacidad de dividir el país en distritos electorales y tener disponible para cada uno de éstos distritos la siguiente información básica:
- Número total de personas
- Número de hombres y mujeres
- Número de personas en edad de votar
- Número de personas entre 18 y 25, 26 y 40 y mayores de 65
- Tipo de vivienda donde viven estas personas
- Distribución del ingreso
Teniendo la información que identifica, aun a grosso modo, el status socioeconómico de las personas, ya sea por el tipo de vivienda o por el ingreso del grupo familiar, tendremos algunas indicaciones del rango de otros patrones de vida similares. Sabiendo cuáles personas son jóvenes, y posiblemente votantes por primera vez; y cuáles son viejas y por ende requieren una especial atención será igualmente muy útil. En todos los otros casos, los educadores querrán aplicar otro tipo de información que les permita interpretar los datos demográficos.
Interpretación de datos
Interpretar el perfil de la gente a partir de su edad o de sus ingresos requiere un entendimiento de la cultura del país. ¿Va la gente a trabajar a muy temprana edad? ¿Cuál es el promedio de expectativa de vida? ¿Qué tan saludables son las personas? ¿A qué edad tiende la gente a tener hijos? ¿Dentro de qué rango de ingresos se considera la pobreza o riqueza, y cómo se expresa ésta en el estilo de vida y gustos de las personas?
Fuentes de Información
Comparando la información de las oficinas nacionales de censo o los departamentos relevantes de gobierno, con la información recolectada internacionalmente a través del Banco Mundial, la Organización Mundial de la Salud o las Naciones Unidas y sus organismos anexos, los educadores pueden obtener rápidamente datos demográficos. Si son afortunados, esta información estará disponible en computadoras y si son extremadamente afortunados, tendrán acceso al GIS (software) actualizado. Así la información esté disponible, ésta estará supeditada al tiempo y tendrá que ser corregida de acuerdo a los mejores estimados posibles.
El papel de las autoridades electorales
Puesto que la autoridad electoral tiene urgencia por conocer buena información demográfica, ésta deseará discutirla con los departamentos de estado con el fin de determinar cómo pueden perfeccionarse los datos disponibles. Esta es una función general más no una función educativa. Los educadores desearán tener acceso a la información, y querrán igualmente sugerir datos adicionales de naturaleza socioeconómica y de actitud.