Necesidad de capacitación
Cuando las fuerzas de seguridad vayan a estar fuertemente implicadas en la seguridad de las operaciones de votación, particularmente en sociedades que salen de un conflicto o se encuentran en un proceso de transición en donde las fuerzas de seguridad pudieron haber estado estrictamente asociadas con algunos contendientes políticos, es imperativo que reciban capacitación sobre el comportamiento general que se espera de ellos y respuestas de emergencia durante el periodo electoral.
En ambientes de bajos riesgos de seguridad, donde las fuerzas armadas cuentan con una tradición de neutralidad política, la vinculación entre la autoridad electoral y las fuerzas de seguridad, o las actividades en los centros de operación conjunta (ver Centros de Operaciones y de Seguridad), pueden resultar suficientes como para hacer que la capacitación resulte superflua.
Contenido de la capacitación
Lo que resulta clave es que todos los miembros de las fuerzas de seguridad comprendan plenamente el impacto que sus acciones -intencionales o no- puedan tener en las percepciones sobre libertad y equidad del proceso electoral.
La aplicación de programas de capacitación sobre tácticas y operaciones en respuesta a situaciones de emergencia, después de que se hayan convenido las estrategias de seguridad con el organismo electoral, es un asunto de los altos mandos de las fuerzas de seguridad. Sin embargo, puede ser útil que el organismo electoral pueda participar en el contenido de los cursos, especialmente en relación al tratamiento de las cuestiones relativas a los derechos de los candidatos y electores, y de monitorear que la capacitación sea llevada a cabo de la manera convenida.
Generalmente resulta innecesario que las fuerzas de seguridad estén familiarizadas al detalle con los procedimientos de votación y escrutinio. Sin embargo, es esencial que tengan un conocimiento general de los procedimientos y que sepan con certeza que puede constituir un delito conforme a la legislación. La asesoría del organismo electoral en la preparación de los materiales de referencia y los manuales (ver Manuales para Fuerzas de Seguridad) puede ser muy útil para asegurar que la capacitación se realice sobre la base de una comprensión exacta de los procedimientos electorales.
Cobertura
Entre las cuestiones específicas que podrían ser incluidas en los programas de capacitación de las fuerzas de seguridad, figuran las siguientes:
- Estándares de desempeño esperado en relación a los derecho humanos y las elecciones;
- Una síntesis sobre el ambiente de la elección, la logística y los arreglos para la votación;
- Métodos para brindar seguridad de una manera ordenada, discreta y profesional.;
- Estrategias de vinculación y comunicación con los oficiales del organismo electoral, enfatizando que los miembros de las fuerzas armadas están al servicio y actúan a solicitud o bajo las órdenes de los oficiales en lo que concierne a la seguridad de la elección;
- Datos sobre amenazas potenciales a la seguridad de la elección derivadas de un análisis de riesgo en los periodos previo, durante y posterior a la jornada electoral;
- Estrategias de respuesta a amenazas, incluyendo simulaciones cuando sea posible;
- Detalles de los planes de acción y estrategias de despliegue;
- Las necesidades de seguridad específica en las reuniones iniciales de los órganos electos, sobre todo en sociedades que emergen de un conflicto.
En el módulo relativo a los estándares de desempeño podrían enfatizarse los siguientes aspectos:
- Requisitos para el respeto de todos los derechos humanos en asuntos de seguridad electoral;
- Cómo evitar actos de intimidación intencionales o no;
- Requisitos estrictos de comportamiento neutral y no partidista durante el periodo electoral y en respuesta a todas las situaciones relativas a la elección;
- Responsabilidad de las fuerzas armadas por sus acciones.
Es importante que exista una consulta permanente entre los responsables de las fuerzas armadas, los organismos electorales y los grupos comunitarios o de derechos humanos en el desarrollo de los materiales de capacitación que comprendan estos asuntos.
Método de capacitación
Dado el gran número de personal de las fuerzas de seguridad que tiene que ser capacitado, en realidad no hay más opción que la de utilizar métodos en cascada. Los oficiales de mayor rango usualmente asumen la capacitación del personal a su cargo. Es muy útil que los administradores electorales y especialistas en derechos humanos se ocupen de las sesiones relativas a sus ámbitos de competencia y se encuentren a la mano para atender cualquier consulta. El número de niveles comprendidos en el método de cascada dependerá de la complejidad de las unidades administrativas y geográficas dentro de la estructura de las fuerzas armadas. No obstante, puede resultar esencial contar con un oficial de contacto para la capacitación en cada unidad.
En sociedades que emergen de un conflicto o donde las fuerzas de seguridad tiene antecedentes de alineamiento político, es preferible que la capacitación de los capacitadores de las fuerzas armadas esté a cargo de especialistas internacionales. Estos especialistas también pueden monitorear que la capacitación se apegue a los estándares convenidos, especialmente en lo relativo a derechos humanos, profesionalismo, sujeción a los oficiales electorales y neutralidad.
Oportunidad
La capacitación sobre la seguridad de las elecciones, especialmente en aspectos de derechos humanos, es una valiosa adición a los programas normales de capacitación a las fuerzas armadas. La capacitación para una elección específica puede ser programada de tal manera que coincida con el inicio de las actividades o el periodo electoral. Las campañas de registro pueden requerir tanta seguridad como los actos de campaña, la votación, el escrutinio o la proclamación de resultados.