Necesidad de un análisis de costo-beneficio
Al considerar el nivel apropiado de tecnología que ha de usarse en los diferentes procesos de la logística electoral, los factores de costo merecen una consideración especial. Pueden ser muy persuasivas las consideraciones de carácter operativo y de imagen pública, el servicio y la fiabilidad que se espera de los sistemas y el aura de modernidad que le puede reportar la nueva tecnología al organismo electoral, pero sin un riguroso análisis en términos de costo-beneficio de las nuevas propuestas tecnológicas, los recursos pueden ser utilizados de manera poco efectiva.
También debe quedar claro para los administradores electorales que la tecnología de información de mercado es muy agresiva y que tiene más fines de lucro que intenciones de beneficio público.
Temas clave al evaluar la tecnología en términos de costo-efectividad
Entre las preguntas clave que se deben atender en relación con el costo-efectividad de las soluciones tecnológicas aplicables, figuran las siguientes:
¿Qué tantos beneficios o valor agregado ofrece el uso de tecnología? ¿Cuál será su contribución al logro de los principios guía de la logística electoral (ver Principios Guía), en comparación con soluciones más sencillas y menos sofisticadas tecnológicamente?
¿Cómo se comparan sus beneficios contra los gastos adicionales que implica?
¿Se justifica el nivel de gastos iniciales de acuerdo con el financiamiento total disponible ? Generalmente, los sistemas basados en la tecnología no producen beneficios de inmediato debido a los niveles iniciales de gasto en equipo, capacitación y otras actividades de arranque que se requieren. Debido a la velocidad de los cambios tecnológicos y a las tendencias potenciales a disminuir los costos de muchas soluciones tecnológicas, es importante determinar el momento más propicio para adquirir tecnología en términos y condiciones de costo-efectividad.
¿Cuáles son los gastos continuos? Se deben considerar con mucho cuidado los costos futuros que implica el mantenimiento de soluciones automatizadas en términos de equipo y programas (software), capacitación, modernización, costos de licencias, etcétera.
Si se introducen soluciones tecnológicas, ¿es mejor instrumentarlas y desarrollarlas de forma interna o contratar especialistas de instituciones externas? Los bajos costos iniciales de la contratación externa podrían resultar atractivos, pero pueden traer desventajas. La dependencia de un contratista exterior para desarrollar soluciones tecnológicas importantes para la logística electoral en tiempos críticos puede causar problemas de fiabilidad.
En virtud de la naturaleza especializada de muchos sistemas automatizados de logística electoral, pueden darse incrementos sustanciales en contratos subsecuentes. Se debe tener siempre en mente la relación entre los costos, por un lado, y el control y la fiabilidad, por el otro.
¿Qué otras alternativas existen para el uso de los fondos que se requerirán? Esta pregunta no se limita a usos alternativos dentro del presupuesto de la elección. Los fondos utilizados en las elecciones generalmente no pueden utilizarse para solventar otros gastos sociales.
Costos sociales
Lo más importante, el uso de tecnología no sólo tendrá costos financieros sino, sobre todo, sociales. Los sistemas automatizados para empacar los materiales electorales, por ejemplo, pueden resultar, en general, más efectivos y menos costosos. Dado que su introducción podría provocar la pérdida de empleos electorales, particularmente en áreas con un elevado nivel de desempleo y así sea de carácter eventual y por un breve periodo, es necesario considerar con mucho detenimiento sus consecuencias en comunidades específicas.
Aunque muchos de estos temas pueden resultar de mayor interés en sociedades menos desarrolladas (ver Consideraciones Especiales para Países de Menor Desarrollo), también son relevantes en contextos más avanzados.