Supervisión del desempeño
Es necesario supervisar activamente la ejecución de las obligaciones de los oficiales electorales durante la jornada electoral, tarea que será llevada a cabo por el administrador del sitio de votación, asistido por otro personal de supervisión disponible. Esto significará llevar a cabo verificaciones regulares y actividades de observación detallada del personal en todas las áreas de la estación de votación, a fin de asegurar que su accionar se mantenga dentro de los más altos estándares, y para prevenir y tomar precauciones en caso de presentarse alguna dificultad. Los administradores del sitio de votación no pueden dirigir efectivamente el proceso electoral con el sólo hecho de ir a sentarse en un escritorio y esperar a que los problemas se presenten.
Las actividades más importantes a supervisar incluyen:
- libre tránsito en entradas y salidas del sitio de votación;
- Control efectivo y ordenado de la fila de electores;
- Controles de prevención ante un eventual fraude y votación múltiple - (cuando los procedimientos lo requieran) tales como verificación de identidad, colecta o marcación de credenciales de identificación u otros documentos, marcación de electores con tinta, toma de declaración de electores- y la correcta aplicación a todos ellos (ver Determinación de la Elegibilidad del Votante y Controles de Integridad);
- Marcación correcta y actualizada en la lista de electores;
- Entrega correcta de papeletas, con instrucciones claras e imparciales a los electores para que puedan votar legalmente (ver Entrega de Papeletas y Emisión del Voto);
- Medidas de seguridad en papeletas y otros materiales electorales utilizados;
- Constante alerta de supervisión de las urnas o equipo para el registro de votos;
- El trato o comunicación de los oficiales de casilla hacia los electores no se perciba con tendencias o inclinaciones hacia ningún participante político, o bien, sin discriminación contra cualquier clase de electores por género, nacionalidad, religión u otros grupos;
- Los compartimientos para emitir el voto ocupados por solo una persona a la vez (a menos que se proporcione asistencia permitida) y que fuera de los ellos no se realice marcación o selección de papeletas (ver Entrega de Papeletas y Emisión del Voto);
- Proporcionar información correcta en respuesta a los cuestionamientos de los electores (ver Brindar Información a los Electores);
- Verificar que los procedimientos para electores no registrados que intentan votar sean correctamente aplicados (verElectores Omitidos en la Lista);
- El área donde se ubican los compartimientos de votación se encuentra libre de basura o desechos, disponibilidad del equipo para escribir en cada compartimiento (en caso de utilizarse boletas de papel), y las boletas estropeadas, desechadas o rehusadas sean recolectadas y convenientemente tratadas (ver "poh02b03');
- Oficiales de casilla y observadores acreditados portando gafetes de identificación todo el tiempo, y que las personas no autorizadas no se encuentren dentro del sitio de votación.
Si en algún momento los oficiales de casilla no conocen con certeza la forma correcta para terminar sus tareas, los administradores del sitio de votación u otro personal de supervisión deberá estar disponible para brindarle asesoría en términos claros, consistentes y actualizados.
Reasignación de tareas
Si la supervisión demuestra que cierto personal está cometiendo errores o que es muy lento para la ejecución de las tareas que se le demandan, el administrador del sitio de votación debe intentar elevar la efectividad mediante una reasignación de este personal a tareas de menor responsabilidad. La habilidad para hacerlo dependerá de qué tan especializada o amplia fue la capacitación como oficial de casilla. Existen ciertas obligaciones, tales como la guarda de las urnas, que serán convenientes para oficiales de casilla menos capaces o que denotan cierta lentitud en el desarrollo de su trabajo.
Evaluación del desempeño
Los oficiales de casilla están en su derecho de esperar que, dentro de la complejidad de sus tareas, estarán provistos con una evaluación objetiva de su desempeño por parte de los administradores. Ello estaría incluido, preferentemente, dentro del reporte del administrador (ver Cierre de la Votación). Llevar a cabo una evaluación breve del desempeño de cada miembro del equipo de trabajo será de gran ayuda para la evaluación del personal en elecciones futuras y, probablemente, contribuirá a la motivación del equipo de trabajo.