En las zonas de alto riesgo donde las fuerzas de seguridad estén involucradas en la protección de los sitios de votación y de los votantes, así como en la transportación del material electoral, la planeación integral de las necesidades de logística ayudará a mantener los niveles requeridos de protección. Para ello,puede resultar efectiva la utilización de un modelo central de operaciones conjuntas (ver Centros de Operaciones y de Seguridad). Por ejemplo, es de poca utilidad que la autoridad electoral defina planes detallados para la entrega y recolección de los materiales en los sitios de votación a lo largo de rutas o durante períodos en los que no se puede ofrecer suficiente seguridad.
Las fuerzas de seguridad necesitan asignar algunas unidades móviles poco tiempo antes, durante y poco después de la jornada electoral. Si bien los sitios de votación son los lugares obvios en que pueden ocurrir disturbios, también pueden suceder en cualquier otro lugar. Por ejemplo, se puede tomar como blanco a grupos de votantes en su trayecto de ida o vuelta de los sitios de votación. Pueden ser útiles los equipos de fuerzas de seguridad de respuesta rápida para el día de la votación (ver Fuerzas de Reacción Rápida y de Reserva).